LOS SECRETOS DE ALMOLOYA

LOS SECRETOS DE ALMOLOYA

En este libro la autora Italiana Corina Giacomello nos muestra la historia de una mujer que fue recluida en el Centro Penitenciario de máxima seguridad Almoloya (actualmente Altiplano) ubicado en Almoloya de Juárez, Estado de México, por causas que hasta hoy en día la ex reclusa desconoce la verdad.
La historia, contada por quien se hace llamar Regina Montoya Escobedo comienza una noche en la que “supuestamente” y menciono así esa palabra porque desde mi punto de vista ella no estaba tan desinformada como lo menciona durante toda la narración de los hechos, en la que andaba de viaje con su esposo (en ese tiempo) celebrando su aniversario en medio de la sierra, en la cual de la nada una avioneta cargada de cocaína aterrizo delante de ellos, y es en este punto donde ella misma lo menciona, comenzó su peor pesadilla.
Esa noche fueron perseguidos por policías y militares en medio de la obscuridad de la selva, hasta que fueron encontrados y llevados a la prisión más cercana y posteriormente fueron trasladados a Almoloya.
Regina fue encarcelada en un Centro penitenciario donde había pocas reclusas y la mayoría eran hombres y a las pocas mujeres las tenían en una zona apartada de los demás dormitorios, lo cual violenta el reglamento de los Centros Penitenciarios porque para eso existen cárceles de hombres y de mujeres, por separado.
A lo largo de este proceso, si es que se le puede llamar así, Regina relata una serie de irregularidades e injusticias que sufrió, al igual que un sinfín de violaciones a sus derechos, en las citas del libro se mencionan los artículos constitucionales y de otras leyes que fueron violados en ese entonces porque cabe mencionar que tanto la CPEUM como le CPP fue reformado en 2008, para dar inicio a los juicios orales.
En el libro se desenmascara el proceso tan irregular y tan lejano a la ley que se lleva a cabo en todos los Centros Penitenciarios y que dejan mucho que desear de nuestro Sistema Penitenciario Mexicano.
Retomando un poco la historia la protagonista menciona que dentro del penal estaba prohibido hablar, cantar, llorar o simplemente el emitir un ruido era motivo de castigo, pero esto solo aplicaba a las reclusas, ya que sus compañeros (hombres) podían desobedecer y no les importaba lo que los custodios dijeran, pero como nadie sabía que en Almoloya había mujeres reclusas las autoridades debían mantener el secreto.
Otra irregularidad de este centro era el área médica la cual era deficiente ya que no contaba con los medicamentos básicos y se rumoraba que el médico se aprovechaba de las reclusas al examinarlas este las tocaba y acariciaba de forma de acoso.
Lo que pretende Regina al narrar su historia no es el buscar que la gente sienta lastima por lo que vivió sino la justicia que ella no tuvo como reclusa, ella está en una lucha ante el Estado, una lucha de reclamo pero, sobre todo se encuentra en una lucha interna, en la cual considero ha salido victoriosa porque hay que aceptar que no cualquiera logra superar (si es que ya lo hizo) una experiencia de vida tan fuerte y dolorosa como la que ella vivó.
Regina no solo se enfrentó a su detención, a ser encarcelada, sino que a lo largo de esos 10 años tuvo que soportar la traición de su esposo, la muerte de su hija y todas las humillaciones existentes.
Solo queda en mí una duda, ¿Realmente ella no sabía que su padre estaba involucrado en el Narcotráfico? La respuesta, solo ella la conoce, solo ella carga en su conciencia esa verdad.

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