No Hay Docencia Sin Dicensia

NO HAY DOCENCIA SIN DISENCIA

Disencia, conjunto de las funciones y actividades de los disentes (educandos)

Los conocimientos indispensables de los educadores críticos, progresistas, algunos son igualmente

necesarios para los educadores conservadores, son conocimientos demandados por la práctica

educativa en sí misma. Hay que enumerar y discutir algunos conocimientos indispensables para la

práctica educativo- crítica que deben contenidos obligatorios en la organización docente, uno de

ellos es; quien se está formando debe asumirse como sujeto de la producción del saber, que el

enseñar no es transferir conocimiento , sino crear las posibilidades de su producción o

construcción. No hay docencia sin discencia, quien enseña aprende al enseñar y quien aprende enseña

al aprender. Cuanto más críticamente se ejerza la capacidad de aprender tanto más se construye y se

desarrolla la curiosidad epistemológica, sin la cuál no alcanzamos el conocimiento cabal del

objeto.

1.- Enseñar exige rigor metódico

El educador democrático no puede negarse el deber de reforzar en su práctica docente, la capacidad

crítica del educando, su curiosidad, su insumisión. El educador tiene que tener la certeza que

aparte de enseñar los contenidos tiene que pensar correctamente, solo quien piensa acertadamente

puede enseñar a pensar acertadamente. También que el conocimiento nuevo supera a otro que fue nuevo

anteriormente, aprender, enseñar e investigar se enfrentan con dos momentos del ciclo gnoseológico:

aquel en el que se enseña y se aprende el conocimiento ya existente y aquel en el que se trabaja la

producción del conocimiento aún no existente. La dodiscencia (docencia-discencia) y la

investigación, indivisibles, son requeridas por el ciclo gnoseológico.

2.-Enseñar exige investigación.

No hay enseñanza sin investigación ni investigación sin enseñanza. Estas actividades se encuentran

uno dentro del otro. Enseño porque busco, porque indagé, porque indago y me indago. Investigo para

comprobar, comprobando intervengo, interviniendo educo y me educo. Investigo para conocer lo que

aún no conozco y comunicar la novedad.

3.- Enseñar exige respeto a los saberes de los educandos.

Saber pensar acertadamente impone al profesor o a la escuela, respetar no solo los saberes con que

llega el educando, sino también discutir con los alumnos la razón de ser de esos saberes en

relación con la enseñanza de esos contenidos. Por qué no discutir con los alumnos la realidad

concreta a la que hay que asociar la materia cuyo contenido se enseña? Porque el educador

pragmático diría; la escuela no es un partido. Solo tiene que enseñar los contenidos transferirlos

a los alumnos, una vez aprendidos estos operan por sí mismos.

4.- Enseñar exige crítica

En la diferencia entre la ingenuidad y la crítica hay una superación en la medida en que la

curiosidad ingenua sin dejar de ser curiosidad se hace crítica. Al hacerse critica se vuelve

rigurosa metódicamente en su aproximación al objeto, se vuelve curiosidad epistemológica. No habría

creatividad sin la curiosidad que nos

mueve y que nos pone pacientemente impaciente

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