Restaurant
Enviado por xzhinox • 2 de Junio de 2014 • 481 Palabras (2 Páginas) • 218 Visitas
contrato de prestación de servicios logísticos -no estando, tampoco, sujeta a la autorización administrativa referida en la normativa de transportes a la que antes hemos aludido-.
Puede parecer obvio señalar que la prestación de servicios logísticos a terceros por parte del operador logístico ha de adecuarse a las necesidades de aquellos. Es rasgo propio e indiscutible de la actividad logística la integración de una diversidad de elementos y procesos, y, de éste cúmulo de actividades nace la lógica dificultad de adecuarla a un contrato tipo. Parece evidente que no toda entidad que demanda servicios logísticos requiere de unas mismas prestaciones como también resulta innegable que difiere sustancialmente el tratamiento que haya de darse a los distintos bienes objeto de la prestación logística porque es bien distinto el tratamiento logístico que ha de darse un vehículo terminado que a los productos lácteos. Y distintos han de ser, también, los medios de los que se dispongan para cada tipo de producto.
Régimen jurídico del contrato de prestación de servicios logísticos
Un contrato mercantil, consensual, atípico y mixto, oneroso, bilateral, sinalagmático, de tracto sucesivo y complejo que, siguiendo el carácter espiritualista que informa el ordenamiento jurídico patrio, no requeriría para su validez de forma escrita. Además, en Cuanto generador de obligaciones de resultado, podría incardinarse en la más amplia categoría de contratos que nuestra más autorizada doctrina ha calificado como de arrendamiento de obra por empresa.
Conceptualmente el contrato logístico o de prestación de servicios logísticos puede ser definido como aquel contrato en virtud del cual una parte, denominada operador logístico, se compromete frente a otra a llevar a cabo la prestación de aquellos servicios de contenido logístico que son requeridos por ésta, a cambio del pago de una contraprestación económica.
Lo cierto es que pese a la atipicidad o complejidad de todo contrato de prestación de servicios logísticos, por lo general, éste puede integrar o participar de obligaciones propias de otros tipos contractuales: transporte de mercancías, depósito, comisión, agencia, mandato, arrendamientos de cosas, de obras y de servicios informáticos, etc. Y ello pese a que, de forma inadecuada, la legislación vigente identifique expresamente, en relación con el almacenista-distribuidor, la existencia única y necesaria de dos tipos contractuales: depósito y transporte.
La segmentación de una y única actividad en, al menos, dos figuras contractuales típicas plantea, como veremos, graves problemas interpretativos y indeseables consecuencias prácticas para las partes contractuales en un contrato de prestación de servicios logísticos.
Problemas de interpretación y de ejecución que vienen identificándose, al menos, en relación con algunas de las más importantes
...