Acido base

El pH de nuestro organismo es la medición que nos indica si un cuerpo está sano o enfermo, según su grado de acidez o alcalinidad. 14 es totalmente alcalino, 7 es neutro y entre 0 y 6 ácido. Para que las células funcionen en forma correcta y adecuada su pH debe ser ligeramente alcalino, de lo contrario las células se enfermarían.

En una persona sana el pH de la sangre se encuentra entre 7,40 y 7,45. Los pH más bajo a lo normal generan alteraciones perjudiciales a la salud. Es por ello que nuestro organismo hace lo imposible para mantener un balance. Constantemente la sangre se encuentra autorregulándose para no caer en acidez, de esta forma garantiza el buen funcionamiento celular, optimizando el metabolismo. El organismo Debería obtener de los alimentos las bases para neutralizar la acidez de la sangre.

El azúcar que utilizamos habitualmente es la sacarosa, un carbohidrato que se encuentra de forma natural en el azúcar de caña. La sacarosa está formada por una molécula de glucosa unida a una molécula de fructosa. Este azúcar se somete a un proceso de refinado, donde pierde las vitaminas y minerales, para que adquiera el color blanco, textura arenosa y un sabor dulce de alta intensidad.

El azúcar ha estado siempre presente en nuestra alimentación y se puede decir que es el peor de todos los ingredientes ya que no tiene ni proteínas, ni grasas, ni minerales, ni vitaminas, solo hidratos de carbono refinados que estresan al páncreas. Su pH es de 2.1, es decir altamente acidificante. Por lo anterior se afirma que la principal consecuencia que genera el consumo de azúcar en nuestro organismo es que acidifica la sangre. Este consumo favorece la aparición de enfermedades físicas, crónicas y agudas, como diabetes, sobrepeso e incluso cáncer (las células cancerígenas requieren el medio ácido para sobrevivir y reproducirse) debido a que son casi siempre consecuencia del exceso de ácido. Entre otros de los efectos de la acidez en nuestro cuerpo, se mencionan problemas en las articulaciones como dolores y entumecimiento, acidez estomacal y reflujos gástricos, hinchazón del cuerpo, falta de concentración en el estudio y en el trabajo, dolor de cabeza, erupciones cutáneas alergias, entre otros.

A medida que la acidez va avanzando de nivel todo se va complicando, el organismo empieza a extraer minerales alcalinos de los tejidos y de la sangre como sodio, potasio, magnesio y calcio. Si el pH de los tejidos se acidifica aún más, los niveles de oxígeno decrecen y el metabolismo celular se detiene. Con ello las células se mueren y se puede llegar a la muerte.

...