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CAPITULO IX: DAVID BRUCE Y LA PISTA DE LA MOSCA TSETSE


Enviado por   •  28 de Septiembre de 2015  •  Documentos de Investigación  •  1.198 Palabras (5 Páginas)  •  919 Visitas

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ESCUELA PREPARATORIA OFICIAL 74

EQUPO 5:

MARCO ANTONIO ROMERO VAZQUEZ

JAIME BEZAEL HURTIZ MEDRANO

JOSE ANTONIO SOTO ROMERO

MARIA FERNANDA SALAZAR ESTELA

DIANA LAURA HERNANDEZ BARAJAS

SANDRA MELÉNDEZ ALVARADO

 KATIA ITZEL ZACATECO COELLO

STHEPHANY FACIO ORTIZ

GRADO: 3ero

GRUPO: V

MATERIA: BIOLOGIA

NOMBRE DE LA PROFESORA: MARIA GUADALUPE GONZALEZ GARCIA

TURNO: VESPERTINO

CAPITULO: IX – DAVID BRUCE: LA PISTA DE LA MOSCA TSETSE

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INTRODUCCION

En este trabajo vamos a leer el libro “Cazadores de Microbios” De Paul de Kruif y comenzando desde el capitulo con el autor que nos toco (el 9 con David Bruce) nosotros vamos a explicar por qué en ciertos párrafos están  claramente vistos los pasos del método científico

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CAPITULO IX: DAVID BRUCE Y LA PISTA DE LA MOSCA TSETSE

1.- OBSERVACION:

“David Bruce y su mujer se encontraban en Natal, viajando a razón de dieciséis kilómetros por día en un carromato, tirado por bueyes con rumbo a Ubombo, en Zululandia.

Habían recibido órdenes de estudiar todo lo que tuviera relación con la enfermedad llamada nagana, nombre que daban los indígenas a algo desconocido que había transformado en desierto grandes cantidades extensiones del sur de África, imposibilitando la agricultura, haciendo peligrosa la caza mayor, y el viajar por aquellas regiones era poco menos que un conato de suicidio.

Instalaron su laboratorio en la colina, un par de microscopios, unos cuantos portaobjetos, bisturís, jeringuillas y hasta unas docenas de tubos de ensayo, cualquier estudiante de Medicina de la época actual se burlaría seguramente de este equipo de jardín de infantes. En estas condiciones dieron comienzo a sus tareas con caballos y bueyes traídos de la planicie, árida colina podían vivir los animales completamente a salvo de la nagana, posibilidades, de que murieran de nagana antes de que tuvieran tiempo de engordar, eran diez contra una.

Bruce afeitaba las orejas a los caballos y les pinchaba con un escalpelo para hacer brotar una gota de sangre, que recogía su mujer, esquivando al mismo tiempo, las coces de los animales.

No tardaron mucho sin dar el primer paso, en la sangre de uno de los caballos enfermos de muerte, observo Bruce entre los glóbulos rojos, ligeramente amarillentos y apelotonados, una danza violenta y desusada, y allí de pronto descubrió la causa de toda aquella agitación: un pequeño ser, mucho mayor, sin embargo, que cualquier microbio corriente: un animal de cuerpo aplastado.

-Son tripanosomas- exclamo Bruce, apresurándose a mostrarlos a su mujer.

Encontraron aquellos seres dotados de aleta, en la sangre, en la secreción de los parpados hinchados y en la extraña gelatina amarillenta que remplazaba la grasa debajo de la piel de todos los animales atacados por la nagana. En los perros, vacas y caballos sanos no encontró Bruce ni uno  solo de estos bichos; pero a medida que las vacas  se agravaban, su número aumentaba en la sangre hasta que podía creerse que la sangre estaba constituida únicamente por ellos. Era una cosa atroz

-Pero, ¿Cómo pasan los tripanosomas de un animal enfermo a uno sano?-reflexionaba Bruce. Aquí en lo alto de esta colina, podemos poner juntos en el mismo establo animales enfermos y animales sanos sin que sea infectado ninguno de estos. Aquí no se ha conocido jamás una vaca o un caballo atacado por nagana, ¿Por qué?

___________________ EXPLICACION____________________________

Estos textos nos muestran como los tripanosomas son los virus que conforman a la nagana, y este virus se ve reflejado en pequeños moscos que pican tanto a humanos como a animales, por eso piden que Bruce lo investigue, junto con su   mujer comienzan a experimentar con caballos y vacas, dando el comienzo a resultado una investigación larga.

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