COVID-19 Un área de oportunidad para la Mecatrónica

COVID-19 Un área de oportunidad para la Mecatrónica

     Oscar es un asalariado mexicano que trabaja para una reconocida empresa manufacturera. El pasado 20 de abril, debido a medidas de prevención por el brote de COVID-19 la compañía tuvo que suspender sus actividades y cerrar temporalmente. Así mismo, al haberse detenido su producción, se vieron en la necesidad de hacer un recorte de personal, por lo que Oscar perdió el empleo. Así como el, muchas personas perdieron sus empleos y sus negocios debido a la pérdida económica generada por el brote de COVID-19 en los pasados días.  De acuerdo con un informe del Banco Asiático de Desarrollo (ADB) publicado por la página web de la región transnacional GMS, podría haber pérdidas económicas a nivel global de hasta 347.000 millones de dólares en el peor escenario. Esta cantidad representaría un 0,4 por ciento del PIB global (Greater Mekong Subregion,2020). Al disminuir la economía de los países, se provoca un descenso de la inversión, un aumento del desempleo y un descenso de ingresos de los negocios provocando el cierre de los mismos. Debido a esta problemática, la reactivación económica puede resentir las secuelas económicas dejadas. Por lo tanto, el impulso de la implementación de sistemas mecatrónicos puede ser un factor decisivo para una rápida recuperación de las pérdidas económicas y el desarrollo del sector productivo.

     Primeramente, es necesario definir que es el COVID-19. Como según lo expresa la Organización Mundial de la Salud por medio de su página web, el COVID-19 descubierto recientemente es una enfermedad infecciosa perteneciente a la familia de Coronavirus. Estos Coronavirus son a su vez, una familia de virus que pueden causar infecciones respiratorias de distintas magnitudes. Este virus se propaga a través de las gotículas que una persona infectada expulsa al momento de toser o exhalar. Por lo que al entrar en contacto estas goticulas con el sistema respiratorio de una persona sana, esta se llega a infectar. En algunos casos de personas que presentan inmunodepresión, la enfermedad se llega a complicar y desarrollan una enfermedad respiratoria grave que puede causar la muerte, según expone la OMS (OMS,2020). Es por esto por lo que se han diseñado medidas de protección para prevenir la propagación de este virus entre las cuales se encuentra permanecer en casa por un periodo de tiempo establecido. Así mismo, se ha dispuesto en muchos países suspender actividades y mantener cerrados temporalmente establecimientos no sustantivos. Por lo que muchas empresas han tenido que acatar las instrucciones de sus gobiernos y han procedido a suspender sus labores.

     Como consecuencia de estas medidas, se ha presenciado un impacto negativo en la economía global. Al estar gran parte de la población resguardada en sus hogares y con la incertidumbre de lo que pueda suceder en el ámbito laboral o de salud, la mayoría decide cuidar sus recursos financieros. Esto produce un descenso del consumo en ciertos sectores de producción que no están estrictamente ligados con insumos de primera necesidad. Agregando a lo anterior, al haber menos personas ocupadas y con una capacidad económica menor el nivel de gastos de la población disminuye. Tal es el caso de industrias como el turismo, en el que los flujos turísticos mundiales pueden tener una caída de entre 1.0 y 3.0 por ciento, presentando un declive en la económica mundial de entre 30 y 50 mil millones de dólares en 2020, tal como lo indica la Organización Mundial del Turismo (OMT) publicado en el sitio web del Foro Económico Mundial (World Economic Forum,2020). Así mismo, sectores como la producción han presentado pérdidas significativas. Tal y como los indicadores de fabricación también se desplomaron en Indonesia, Vietnam y Filipinas, según mostraron las encuestas del Índice de Gerentes de Compras (PMI, por sus siglas en inglés) (World Economic Forum,2020)..

     Del mismo modo, México ha tenido repercusiones económicas que han mermado la estabilidad financiera de muchas empresas. De acuerdo con una encuesta realizada por Coparmex y publicada en el sitio web de El informador, “el 56 por ciento de las empresas afiliadas ya tiene identificado el o las áreas con mayor impacto al interior de sus empresas, siendo las áreas comerciales y de producción las de mayor afectación” (Velasco Jorge, 2020). De igual manera lo expresa el diario Mexicano “El Universal” en un artículo publicado “¿Cuál es el impacto real del coronavirus sobre la economía?” en su pagina web, en la cual manifiesta que es posible que el PIB presente un declive considerable teniendo en cuenta las repercusiones del COVID-19, así como el impacto que puede ejercer sobre la demanda interna de servicios, la debilidad de la demanda externa y las disrupciones que generará sobre las cadenas de producción en el sector manufacturero mexicano (Cervantes Alejandro,2020). Resulta evidente que la producción de las empresas está ligada con la cantidad de Ingresos o Ganancias que se puedan generar, por lo tanto, a menor producción se pronuncia también un ingreso menor en las finanzas de cada empresa. Como se puede observar, esta pandemia esta debilitando los sectores de producción empresariales y de las industrias de manera que cuando se dé la reactivación económica estos daños en dichos sectores tardarán en desaparecer provocando una lenta y difícil recuperación de las perdidas económicas. Por lo tanto, es importante tomar en cuenta medios que proporcionen un apoyo a la recuperación de la producción una vez que se reactive la economía.

...