Como indique en el informe anterior, Martin más que tener daños físicos, necesitar tratamientos u operaciones, el daño que tenía era a nivel de traumas, desconfianza hacia todas las personas y por sobre mucho miedo.

Nombre: Martín

Raza: Schnauzer Macho

Recibido por: Cristina Figueroa

Como indique en el informe anterior, Martin más que tener daños físicos, necesitar tratamientos u operaciones, el daño que tenía era a nivel de traumas, desconfianza hacia todas las personas y por sobre mucho miedo.

Martin fue revisado a la semana en que me fue entregado, sin encontrar enfermedades o indicaciones de llevar a cabo un tratamiento médico para él, ya que físicamente solo tenía cicatrices o costras de heridas anteriores.

La segunda visita fue en la quincena de enero, en la que nuevamente fue revisado por la doctora Karen, con quien conversamos del avance que había tenido Martin (aunque haya sido poco). Nuevamente no se le indican tratamientos médicos para seguir en la casa, solo el motivarlo y entregarle cada vez más confianza y que se fuera sintiendo a gusto en su casa.

Nuestra gran ayuda en la rehabilitación de Martin había sido Lourdes (nuestra bulldog ingles), que era la que le enseñaba a jugar, lo acompañaba y le daba la confianza para acercarse a nosotros en la casa, lamentablemente a finales de febrero nuestra Lourdes falleció, lo que volvió a modificar y a retroceder un poco en la actitud de Martin.

Durante los primeros días nuevamente en que se escondía, y la buscaba por toda la casa, se arrancaba de nosotros y nuevamente salía a comer solo cuando no había nadie en el patio. Debimos volver a comenzar nuevamente a acercarnos de apoco, ya que se arrancaba y escondía, volvió a tenerle miedo a las piernas de las personas, en lo posible había que acercarse a él lo más agachado que se podía, no se dejaba hacer cariño y menos ser tomado en brazos.

A medida que fueron pasando los días volvió a ir retomando la calma, de apoco salía de sus escondites cuando alguno salía al patio, si bien seguía sin dejar que lo tomaran de apoco el interactuaba y empezó a jugar solo en el patio.

Lo que más me ha llamado la atención en este último tiempo y al ver las fotos que suben los otros depositarios es que Martin aún no se deja abrazar, tomar, no se sube a la cama y cada vez que tratábamos de sacarlo a pasear o a que interactuara con más gente, el comenzaba a tiritar y el volver a la casa se volvía a esconder hasta que se calmaba solo. Por lo que decidimos no forzarlo a salir, solo ir haciéndolo con mucha calma.

Nos dimos cuenta que es con mis Tíos es con los que se siente más cómodo, en un principio nos fijamos que al llegar a visitarnos Martin era a los únicos extraños a los que salía a recibir y que no salía arrancando cuando ellos se acercaban a saludarlo.

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