Contaminación

CIUDAD DE MÉXICO, 15 de febrero.- Alrededor de mil personas mueren cada año en la Ciudad de México por culpa de las altas concentraciones de partículas contaminantes PM 2.5 en el aire, revelaron estudios epidemiológicos realizados por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).

La simple bocanada de aire en exteriores en días con altos niveles de contaminación e incluso al momento de precontingencias ambientales causadas por dichas partículas, agravó en todos los casos problemas respiratorios previos, principalmente asma, provocando a sus víctimas una muerte prematura.

La población afectada, según los estudios del INSP, han sido niños y adultos mayores, aunque también hay casos de jóvenes y adultos, lo que refleja el riesgo al que está expuesta toda la gente.

"Hemos observado asociaciones importantes entre los padecimientos y la exposición a contaminantes como las PM 2.5, las cuales no son exclusivas de la población susceptible aunque en ellos se incrementa el efecto o están en mayor riesgo del que el impacto sea mayor, pero ninguno de nosotros, estamos exentos", aseguró Albino Barraza, investigador en ciencias médicas del INSP.

El problema de las partículas PM 2.5, generadas por la combustión de diesel de automóviles y la industria, así como por la reacción atmosférica entre gases como el dióxido de azufre, óxidos de nitrógeno y por compuestos orgánicos, es que su diminuto tamaño les permite ingresar sin barreras al organismo, atacando principalmente a los pulmones.

Las PM 2.5 son entre 25 y 100 veces más pequeñas que el grosor de un cabello humano.

Es por lo anterior que la Organización Mundial de la Salud considera que afectan mucho más que cualquier otro contaminante, porque al inhalarlas llegan hasta los lugares más profundos del cuerpo.

Entre los principales daños que ocasiona está la dificultad para respirar y la inflamación de vías respiratorias que se manifiesta en síntomas como la tos, dolores de pecho, disnea esa sensación súbita de falta de aire, dolor de oído o recrudecimiento o crisis de asma.

Contaminación asesina

Según cifras del INSP, cerca de cuatro mil muertes al año entre los capitalinos se atribuyen a la contaminación atmosférica, de las cuales mil son provocadas específicamente por PM 2.5, lo que representa el 25 por ciento de la mortandad que podría evitarse si la calidad del aire que se respira fuera diferente.

"El riesgo ya está presente, es insidioso, está afectando a poblaciones susceptibles, la gente no lo siente tan fuerte, pero podría ser mayor si no se controla la emisión de partículas", dijo Humberto Riojas, director del área de Salud Ambiental del INSP.

Reconoció que cada vez son más y de menor tamaño las partículas de contaminantes que ingresan al sistema respiratorio y dañan seriamente la salud de la gente, por lo que los futuros estudios se irán centrando en éstas, en su combate y la protección que requerirá el organismo para defenderse.

De igual forma, los sistemas de medición de la calidad del aire y estrategias de combate, como será el programa "Proaire 2011-2020", que actualmente se encuentra en elaboración, ayudarán a conocer la situación actual y establecerá estrategias para adaptarse o combatir el problema de la contaminación, que además de dañar el medio ambiente, es evidente que se está convirtiendo en un veneno inhalable para la gente.

Aseguran que no hay datos

Respecto al tema, la Secretaría de Salud del DF, quien tiene a su cargo la investigación epidemiológica en la capital del país, negó que existan en la ciudad muertes ocasionadas por la contaminación de partículas PM 2.5.

"En el sistema de vigilancia epidemiológica de la mortalidad no se han registrado decesos relacionados con contaminantes atmosféricos o por causas directas atribuibles", sostuvo César Sandoval, director de Inteligencia y Vigilancia Epidemiológica de la Secretaría de Salud del DF.

Explicó que pese a la relación entre las enfermedades respiratorias agudas y la contaminación ambiental, el sistema de salud local registró una disminución del 16 por ciento de casos atendidos en los últimos tres años.

Sin embargo, en lo que va del 2011, todos los

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