Contaminación

No es el invierno, o no debería ser, la estación sombría del año a la cual sobrevivir. Durante el frío exterior tenemos la posibilidad de desarrollar aspectos como el recogimiento y un mayor orden interior al lo que invita el propio clima.

El invierno es la estación más indicada para desarrollar las fuerzas físicas de resistencia a partir de medios naturales como los baños de aire y de sol, una alimentación en armonía con el entorno y adecuados complementos con los cuales paliar malestares típicos del frío.

Fortalecer las defensas

Algunos nutrientes han demostrado tener la capacidad de inhibir la replicación de los virus catarrales y aumentar la actividad de las defensas. Este es el caso de la vitamina C, el Zinc y el Beta-caroteno. Las dosis recomendadas en caso de catarro común son de 500 a 1000 mg. diarios de vitamina C, 25000 UI diarias de Beta-carotenos y 23 mg. de Zinc (éste último sólo durante una semana)

¡Por supuesto siempre bajo supervisión médica o de un especialista!

Antibióticos naturales

La Equinácea, el Astrágalus, la Hidrastis y el Regaliz son las cuatro plantas medicinales de reconocidas acciones antibióticas frente a bacterias, virus y hongos.

Valen tanto para prevenir resfriados e infecciones como para tratar un problema actual.

Se pueden tomar en gotas, cápsulas o en infusión.

Pedir siempre consejo al médico o especialista.

Ayudar a la fiebre

La fiebre por sí misma no es una enfermedad que requiera contramedidas, al contrario, la elevación de temperatura indica que el organismo se defiende contra los agentes patógenos y que el sistema inmunitario está en plena actividad.

Para colaborar con esta ardua tarea es necesario activar la función de los riñones y la sudoración. Una infusión a partes iguales de flores de saúco, tila, cola de caballo y tomillo ayuda al organismo en su voluntad de restablecer el equilibrio térmico. Para potenciar su efecto depurativo y diurético podemos añadir de 15 a 20 gotas de extracto de zarzaparrilla en cada infusión.

Para una curación más rápida es conveniente que la dieta sea muy rica en zumos de naranjas frescas y caldo vegetal además de la tisana hasta que la fiebre desaparezca.

Cebolla, Limón y Própolis ante los problemas de garganta

Ante el dolor por inflamación de la garganta podemos elaborar nosotros mismos un jarabe muy eficaz dejando macerar una cebolla roja mediana en el zumo de 1 limón y un poco de agua durante toda la noche.

A la mañana siguiente le añadimos 20 gotas de extracto de própolis el cual actúa como antiséptico natural. Beberemos la mezcla lentamente y con pajita 2 o 3 veces al día hasta que desaparezca la faringitis o amigdalitis.

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