Controversias Eticos Legales

Introducción

El ser humano tiene la habilidad de socializar y comunicarse intercambiando ideas y sentimientos. Es una forma de expresión y cuando el objetivo es el contar sus experiencias entonces podemos enriquecernos culturalmente. Pero no todo puede decirse. Cuando un familiar o mejor amigo te dice un secreto y a la misma vez “Por favor, no le digas a nadie”, es porque confía en ti. De igual manera día a día en nuestra profesión de enfermería trabajamos con diferentes pacientes los cuáles confían su salud en nosotros.

Parte de un texto de nuestra juramentación de enfermería dice: “Haré todo lo que esté a mi alcance para elevar el nivel de la enfermería y consideraré como confidencial toda información que me sea revelada en el ejercicio de mi profesión, así como todos los asuntos familiares en mis pacientes”.

Por lo tanto debemos tener discreción y respeto al momento de trabajar con toda información de nuestros pacientes. En este trabajo veremos como un pequeño error puede comprometer al profesional de la salud en la revelación de información.

Caso #2

La enfermera X trabaja en la unidad de intensivo de adultos. Tiene a su cargo un paciente conectado a un ventilador mecánico. Recibe una llamada del laboratorio informándole que los resultados de los gases arteriales del paciente están alterados, entre ellos la saturación está en 65%. La enfermera llama inmediatamente al médico para informarle los resultados y el médico le pide que le envíe los resultados a su correo electrónico para verlos con más detalle. La enfermera le envía el correo electrónico, pero luego se percata que escribió mal la dirección y que se lo envió a otra persona. Finalmente arregló la dirección y se lo envió al doctor.

El médico se ve afectado con esta situación al estar esperando los resultados y no recibirlos al momento indicado. El resultado de estos laboratorios son importantes en la toma de decisiones del médico y la evolución de la condición del paciente. El paciente también se ve afectado por la no confidencialidad de información. Aunque pudiera ser no tanta la culpa de la enfermera por no haberse dado cuenta; sí debía tener más cautela.

Aquí entramos en la controversia si realmente existe culpa por parte de la enfermera, sin embargo, una enfermera es responsable de sí misma sobre todo. Además la enfermera tiene la responsabilidad con el cliente, la profesión, la empresa y la sociedad. Debemos recordar que el paciente, la institución y la sociedad confían en el buen criterio de la enfermera.

Los profesionales de la salud garantizan que se respete la privacidad del cliente. Es real saber que la información médica e historial no se pueden copiar ni compartir sin el consentimiento del cliente. Esto incluye resultados de laboratorio, diagnóstico ni pronóstico. Incluso se debe evitar que miembros de la familia o allegados tengan acceso a

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