DESARROLLO SUSTENTABLE

GUÍA PARA EL FACILITADOR

Curso en Prácticas Educativas para el Desarrollo Sustentable

Introducción.

La presente “Guía para el Facilitador” tiene como objetivo principal orientar a quienes impartirán el Curso en Prácticas Educativas para el Desarrollo Sustentable en todos los aspectos técnicos, teórico-conceptuales, de aprendizaje y enseñanza así como de tipo administrativo y logístico, para el cumplimiento de los propósitos del mismo.

Es importante referir que este Curso está orientado a los Maestros de Educación Inicial, Preescolar regular, Primaria regular, Primaria multigrado, Secundaria general y técnica, Telesecundaria, Educación artística y Educación física y tiene como principales destinatarios a maestros frente a grupo, Personal de Apoyo Técnico – Pedagógico y Directores de Escuelas, Coordinadores y Jefes de Zona..

El Curso tiene una duración de 40 dividido en 7 Módulos de trabajo:

Módulo 1 “Antecedentes del desarrollo sustentable” con 4 horas de duración.

Módulo 2 “Un nuevo modelo de desarrollo” con 4 horas de duración.

Módulo 3 “El desarrollo sustentable en México” con 4 horas de duración.

Módulo 4 “Instrumentos de gestión para el desarrollo sustentable” con 4 horas de duración.

Módulo 5 “Los retos de la educación básica en materia de desarrollo sustentable en México” con 8 horas de duración.

Módulo 6 “Elaboración de un Proyecto de Escuela Sustentable Básico con 10 horas de duración.

Módulo 7 “Entrenamiento para la potenciación de la estructura neuronal y mental para fortalecer habilidades de aprendizaje” con 6 horas de duración.

En Curso está organizado para trabajar con un mínimo de 15 participantes y un máximo de 25 con la intención de poder generar dinámicas grupales que fortalezcan la capacidad de intercambio de experiencias, la reflexión colectiva sobre los diversos temas tratados y faciliten la evaluación sobre el grado de aprendizaje de los conceptos esenciales impartidos durante el Curso.

Fundamentación.

El desarrollo temático de cada uno de los 7 módulo encuentra su justificación en el hecho de que “La Revolución Industrial, período histórico comprendido entre la segunda mitad del siglo XVIII y principios del siglo XIX, generó profundas transformaciones en la manera de producir y por consecuencia impactando en el desarrollo socioeconómico, tecnológico, cultural y en el uso y aprovechamiento de los recursos naturales. A partir de este momento, y gracias al acelerado proceso de globalización, se impulsan diversos modelos de desarrollo socioeconómico que, en mayor o menor medida, privilegian un código de valores fundado en cuatro principios: cantidad, expansión, competición y dominación.

Doscientos años después se evidencia la necesidad de revisar los alcances y logros de estos modelos, a la luz de la demanda creciente de satisfactores sociales por parte de una población que pasó, en este período de tiempo, de mil millones de habitantes a 6 mil millones durante el siglo XX y que, durante el presente año, llegará a los 7 mil millones en todo el planeta. De acuerdo a las cifras de la Organización de las Naciones Unidas 5 mil millones de los 7 mil nacieron o nacerán en el mundo pobre, con las evidentes consecuencias en materia de desigualdad económica, falta de oportunidades, sobre todo las relacionadas con el acceso a la educación, insuficiencia de servicios básicos, carencia de alimentos, incremento de la contaminación e impacto ambiental, flujos migratorios intensos e inseguridad y violencia.

En la década de los años 70, a partir de la publicación del informe “Los límites del crecimiento” por parte del Club de Roma, se hace un llamado, al mundo entero, sobre la necesidad de revisar, desde el punto de vista científico, las tendencias de este modelo de crecimiento económico y determinar los límites, factibles y viables, en materia de impacto ambiental y uso y aprovechamiento de recursos naturales.

A partir de estas iniciativas, en 1987, la Comisión Mundial sobre Medio Ambiente y Desarrollo de la Organización de las Naciones Unidas, da a conocer los resultados sobre el estudio de la situación del mundo en materia de: población y recursos naturales; especies y ecosistemas; energía; industria y el reto urbano. Este informe es conocido como “Nuestro Futuro Común” y define, por primera vez, el concepto de desarrollo sustentable como aquel “que garantiza la necesidades del presente sin comprometer las posibilidades de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades”.

Después de la presentación de este informe, en diferentes encuentros internacionales relacionados con los temas de población, desarrollo, medio ambiente, crecimiento económico y cambio climático, el mundo inicia la revolución hacia el desarrollo sustentable, fundado en un nuevo código de valores que, ahora, atiende prioritariamente conceptos como calidad, conservación, cooperación y compañerismo en las diferentes dimensiones del modelo: social, económica, ambiental, institucional, legal y tecnológica.

Nuestro país se ha comprometido seriamente con el impulso a diversas estrategias de trabajo que promuevan el desarrollo sustentable con distintos sectores, tanto gubernamentales como empresariales y de la sociedad civil organizada, sin embargo el reto es aún enorme por lo que se requiere profundizar en la actualización, capacitación, enseñanza y sensibilización sobre nuevas prácticas que impulsen el desarrollo sustentable, desde la educación básica, comprometiendo a los maestros en la formación de los líderes del desarrollo sustentable que México necesita”

Sobre esta base se ha determinado que el propósito general del Curso sea: “Proporcionar a los participantes los conocimientos teóricos y prácticos básicos sobre el cuidado del medio ambiente y los recursos naturales mediante el análisis y estudio de cada una de las dimensiones del modelo de desarrollo sustentable actuales: sociedad, economía, medio ambiente, tecnología, relaciones institucionales y cumplimiento legal para contribuir a su formación como líderes en desarrollo sustentable desde la educación básica”.

El perfil de ingreso deberá atender los siguientes requisitos: “Ser profesor de educación básica en servicio, actitud para el trabajo y superación profesional y personal, con habilidades proactivas y de trabajo en equipo, que presente en su trabajo y su cotidianidad una actitud analítica y reflexiva y sea flexible para adoptar metodologías de trabajo alternativas”.

Mientras que el perfil de egreso deberá

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