Demás De Agua, Nutrientes, Luz Solar Y Dioxido De Carbono, Necesitan Hormonas. Las Diferentes Fases Del Desarrollo Vegetal Están Reguladas Por Diferentes Sustancias Químicas Reguladores De Crecimiento, Fitohormonas, Y Como No, Hormonas Vegetales. Las H
Enviado por 123puentes • 28 de Octubre de 2013 • 3.067 Palabras (13 Páginas) • 830 Visitas
PRESENTADO POR:
VALERIA ALVAREZ GARRIDO
CRISTIAN PEREZ ARRIETA
KEILA PUENTES LADEUS
PROFESOR:
URIEL MILLAN
UNIVERSIDAD DE SUCRE
FACULTAD DE INGENIERIA
INGENIERIA AGRICOLA
FISIOLOGIA VEGETAL
TERCER SEMESTRE
SINCELEJO
29-10-2013
INTRODUCCIÓN
Las plantas, para crecer, además de agua, nutrientes, luz solar y dioxido de carbono, necesitan hormonas.
Las diferentes fases del desarrollo vegetal están reguladas por diferentes sustancias químicas reguladores de crecimiento, fitohormonas, y como no, hormonas vegetales.
Las hormonas vegetales son unas sustancias orgánicas que se encuentra a una muy baja concentración, y que se sintetizan en un determinado lugar de la planta, se trasporta a otro, que es donde ejerce sus efectos reguladores, pero todavía no se conoce el mecanismo preciso mediante el cual funcionan.
Hasta el momento se conocen cinco grupos de fitohormonas:
• Auxinas
• Giberelinas
• Citoquininas
• Ácido abscísico
• Etileno
• Se da también la existencia de numerosas sustancias sintéticas, que pueden ser análogas o no en estructura química a las fitohormonas, las cuales suelen presentar una actividad biológica muy similar a ciertas hormonas vegetales.
• Se considera reguladores de crecimiento a los compuestos orgánicos, bien sean naturales o sintéticos que modifiquen o inhiban en una cierta cantidad el crecimiento o el desarrollo de la planta., siempre y cuando lo hagan de manera similar a como actúan las hormonas vegetales.
MARCO TEÓRICO
Se entiende por hormonas vegetales aquellas substancias que son sintetizadas en un determinado lugar de la planta y se translocan a otro, donde actúan a muy bajas concentraciones, regulando el crecimiento, desarrollo ó metabolismo del vegetal. El término “substancias reguladoras del crecimiento” es más general y abarca a las substancias tanto de origen natural como sintetizadas en laboratorio que determinan respuestas a nivel de crecimiento, metabolismo ó desarrollo en la planta.
Las fitohormonas pertenecen a cinco grupos conocidos de compuestos que ocurren en forma natural, cada uno de los cuales exhibe propiedades fuertes de regulación del crecimiento en plantas, y cada uno con su estructura particular y activos a muy bajas concentraciones dentro de la planta:
Auxinas
Citoquininas
Giberalinas
Etileno
Acido abscísico
GIBERALINAS
La giberealinas, sustancia con la propiedad de producir el alargamiento de los tallos demanera notable, fue encontrada en Japón, en extractos del hongo Gibberella fujikuroi, parásito del arroz. Posteriormente en Inglaterra y Estados Unidos se descubrió que eran de ocurrencia natural en los vegetales superiores y se la consideró una hormona. Estructuralmente es un terpenoide, con cuatro unidades de isopreno, que forman el ciclo del kaureno. Actualmente se conocen 90 giberelinas (AG1, AG2, AG3,...AGn), todas derivadas del kaureno; una misma especie de planta puede contener varias con distinta actividad fisiológica, pero se cree que le bastaría con una sola. Posee marcadas propiedades como promotor de crecimiento. La más conspicua respuesta del vegetal al tratamiento con ácido giberélico (AG3) es el alargamiento del eje caulinar. Provocan la elongación celular al estimular las mitosis, incrementar la plasticidad de la pared, y aumentar el contenido de glucosa y fructosa -producto de la hidrólisis de glucanos y fructosanos- lo que disminuye el potencial agua. Así penetra agua a la célula y provoca su expansión. En general este alargamiento está muy relacionado a las especies jóvenes en activo crecimiento variando ampliamente de acuerdo a las especies, a la influencia de los factores externos y a la edad de la planta principalmente. Las plantas bienales arrosetadas y los mutantes enanos son las que responden más notoriamente a la aplicación de pocos mg de AG3. Los mutantes enanos carecen del gen que codifica una enzima necesaria para la síntesis de la AG1 y AG19, promotoras del alargamiento de la mayoría de ellos y de muchas otras especies normales. Los tratamientos con giberélico producen, en general, una reducción en el número, longitud y peso de las raíces.
Altas concentraciones de este regulador son inhibitorias pero no siempre resultan
tóxicas. El rango efectivo de concentración es extraordinariamente amplio. Su traslado es
sistémico y no polar, por lo tanto no tiende a acumularse en ningún órgano determinado, es decir que aplicado a cualquier parte de la planta aparentemente afecta todas las zonas de crecimiento. Sin embargo no altera mayormente el número de internodios, ni el crecimiento es anormal; éste es rápido y extenso pero no incontrolado. Anatómicamente, el incremento de
crecimiento se debe a un alargamiento celular. El proceso de alargamiento por división celular es de muy poca importancia, habiéndose manifestado únicamente en algunos tejidos. Otros efectos importantes son: la inducción de partenocarpia, el acortamiento del período hasta floración, en especies que requieren días largos para florecer, las AGs los reemplazan, e igualmente lo hacen con el período de vernalización en algunas de ellas, favorecen el cuajado de frutos. Rompen la dormición de semillas, en el proceso de germinación desempeñan un papel importante en la solubilización de las reservas, en los cariopses de cereales, las AGn sintetizadas en el embrión, desreprimen en la capa de aleurona, el gen que codifica la síntesis de la α- amilasa, enzima que hidroliza el almidón del endosperma y produce glucosa soluble. Además de la α- amilasa promueven la síntesis de otras enzimas hidrolíticas. Algunos retardantes del crecimiento tales como el CCC (cicocel), Fosfón, etc. inhiben la síntesis de las AGn.
CITOCININAS
Este regulador del crecimiento, fue descubierto en 1954 a partir de ADN, como una sustancia que promovía la división celular en los tejidos cultivados "in vitro". Sin su agregado al medio de cultivo, las células producían la cariocinesis pero no la citocinesis. Este compuesto químico se llamó cinetina (del griego cinesis = movimiento). Esta sustancia no está presente en la planta, pero diversos compuestos con estructura química similar fueron aislados de endosperma de maíz y del coco y posteriormente de otros órganos. Estas hormonas de la división celular se denominan citocininas.
Todas son derivadas de la adenina, pero naturales sólo son la zeatina, el ribósido de zeatina, la isopenteniladenina
...