Diagnostico actual de las Planta de tratamiento de aguas residuales en Campeche

Introducción:

 Podemos comenzar diciendo que el agua es uno de los elementos naturales que se encuentra en mayor cantidad en el planeta Tierra. Además, podemos agregar que el agua es uno de esos elementos que más directamente tienen que ver con la posibilidad del desarrollo de distintas formas de vida. Del mismo modo que sucede con el oxígeno, el agua es esencial para que tanto los vegetales como los animales, el ser humano y todas las formas de vida conocidas puedan existir.

En el caso particular del ser humano, el agua es importante para ser consumida (en cuyo caso tiene que estar potabilizada) y para que el organismo pueda seguir funcionando de manera correcta. Pero el agua no es sólo importante para el consumo del ser humano sino que también tiene que ver con permitir la existencia de un complejo número de seres vivos.

El agua es un elemento de vital importancia, para el desarrollo socio-económico de cualquier sociedad humana en el mundo. Sirve para actividades productivas como para cultivar, criar animales, higiene, medio para viajar, como fuente de energía para distintas fábricas, entre otros usos.

Cuidar este recurso que le pertenece a todos. Una forma de cuidar nuestro recurso hídrico, es que podamos usarla aunque parezca que el agua que usamos ya no es de utilidad. Las aguas ya usadas para algún fin ya sea de uso humano o industria, pasan a ser un agua residual, perdiendo sus propiedades originales y pudiendo volverse en cierto nivel tóxica para reusó.

El tratamiento de aguas residuales se ha vuelto una operación clave no solo de industria sino para el desarrollo sostenible de nuestro planeta, ya que podemos tratar las aguas que parecen no tener ningún uso posterior. Gracias a una serie de procesos físicos, químicos y biológicos se puede intentar ya bien, no en su calidad original pero si tratarla hasta un punto donde pueda ser benéfica y reusada en alguna otra actividad.

La eliminación de aguas residuales no tratadas produce impactos ambientales negativos en los cursos de agua receptores, en función de la concentración de contaminantes que dichas aguas contengan.

Como ejemplo, los metales pesados y sustancias de difícil descomposición, tales como DDT y otros plaguicidas adquiridos durante el uso del agua, son venenosos y su efecto puede no apreciarse a corto plazo. Pero con el paso del tiempo, se acumulan dentro de los organismos y pueden llegar a matarlos.

Tanto a nivel nacional, como a nivel estado; existen diversas normas que protegen el uso moderado y controlado del agua, lo que ocurre es que no se sigue un control y vigilancia constantes.

El desarrollo de planta de tratamientos de aguas residuales no ha llegado a ser el óptimo y esperado en el país y estado. No se ha tomado una conciencia real del impacto de estas tecnologías en beneficio del agua y por consiguiente del ambiente de donde tomamos materias primas para poder llevar nuestra vida diaria a un nivel de calidad de vida aceptable.

Existen leyes y normas, establecidas incluso en la constitución política de nuestro país, máximo documento legislativo. Lamentablemente problemas como la corrupción o la misma desorganización entre los órdenes de poder político ha obstruido el desarrollo pleno de estos procesos.

Estado actual de las plantas de tratamiento de aguas residuales en Campeche:

Campeche cuenta con una población según el último informe del INEGI (2015): 899,931 habitantes. El consumo promedio de agua por habitante en México es de 25 litros al día. Haciendo un aproximado rápido del consumo diario total del estado nos da un total de 22,498,275 litros al día; 22498.275 m3/día.

En San Francisco de Campeche cuenta con una población según el último informe del INEGI (2015): 283 025 habitantes. Lo que nos da un consumo diario de agua aproximado de 7, 075, 625 litros de agua al día. Una cantidad la cual no toma en cuenta el uso del agua para actividades ganaderas, agricultura, industrias, entre otras.

En palabras del director local de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), actualmente el volumen de agua potable con el que se abastece a esta ciudad es de mil 200 litros por segundo; de este gasto hídrico, el 80 por cierto se descarga como agua residual, por lo que se generan descargas de 960 litros por segundo, cantidad de la cual la capital del Estado sólo tiene capacidad instalada de saneamiento de 96 litros por segundo, es decir, tan sólo el 10 por cierto.

Una cantidad bastante deplorable, comparada a niveles que se esperarían, solo un 10 por ciento, lo cual nos indica que el otro 90 por ciento no utilizado termina de alguna forma afectando la salud del medio ambiente, terminando ya sea por escorrentía o por vertido directo (drenaje), en algún punto de nuestra bahía. Recordar que la zona de manglares ubicado en nuestras costas, son ecosistemas protegidos, y de vital importancia no solo a nivel nacional sino internacional, y múltiples tratados internacionales protegen estos ecosistemas los cuales se ven dañados por estas aguas contaminadas.

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