Gases Efecto Invernadero

Cuando se escucha “calentamiento global” muchas personas la relacionan con una de las mayores amenazas que afronta el planeta Tierra. Por otro lado también se cuestionan “¿Qué es lo que ocasiona este fenómeno?” Algunos científicos proponen que los gases de efecto invernadero, otros hablan de que el “astro mayor”, el Sol con las diferentes manchas y erupciones que se han hecho frecuentes en los últimos años.

Es una certeza que se está calentando el planeta tierra y desde 1950 han ocurrido grandes cambios que en ninguna época se habían observado: “La atmosfera y los océanos se están calentando, las masas de nieve y hielo están disminuyendo, el nivel del mar subiendo, y la concentración de gases de efecto invernadero aumentando” (5).

La Tierra tiene un hábitat favorable que permite que haya vida, es en parte gracias a la relación que tiene con el Sol y el Efecto Invernadero. El Sol da energía a la Tierra en forma de radiación a través del espacio y la atmósfera, está se transforma en energía térmica, parte de la energía es absorbida, otra parte es reflejada como una radiación de onda larga (2). El Sol posee una dinámica solar la cual varía con el tiempo, esta envía diferentes descargas a las áreas de la Tierra lo que causa cambios en el clima.

El efecto invernadero es un fenómeno natural que ayuda a la termorregulación de la Tierra, esta absorbe el 70% de la energía solar con la cual se calienta el aire, el suelo y el mar; si no fuese por el efecto invernadero tendríamos temperaturas similares a 18 ºC bajo cero. Cuando ocurre todo este proceso la Tierra desprende energía como radiación infrarroja, evitando que la temperatura de la Tierra aumente. Pero son las crecientes emisiones de gases de efecto invernadero (G.E.I) que durante los últimos 150 años ha contribuido al calentamiento global (1).

Existen varios gases que contribuyen al efecto invernadero entre ellos están el dióxido de carbono, óxido nitroso, el metano, el vapor de agua y los halocarbonos (gases que contienen flúor, cloro y bromo). La concentración de estos en la atmósfera se ha incrementado de manera significativa con la revolución industrial y con el aumento en el consumo de combustibles fósiles, como el carbón y el petróleo. A estos factores se añade la creciente población de animales de granja que en su digestión liberan metano y óxido nitroso (4). Respecto a la agricultura esta en cierta medida aporta a los gases de efecto invernadero pero esta práctica causa una liberación mayor por ejemplo el hecho de la deforestación de grandes hectáreas de bosque para el cultivo, los pesticidas y plaguicidas utilizados, añadiéndoles el transporte que requieren los diferentes productos (3).

Los G.E.I tienen la capacidad de retener el calor, cada gas actúa de manera distinta, algunos de ellos retienen más calor que el CO2 (dióxido de carbono), un ejemplo es el CH4 (metano) produce

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