INMUNOLOGÍA CELULAR Y MOLECULAR

INMUNOLOGÍA CELULAR Y MOLECULAR

CASO CLÍNICO N° 01

Como anteriormente ya se había estudiado nos indica que es un varón de 19 años que es sexualmente activo, y que tiene una serie de sintomatologías producto de la bacteria Ureaplasma Urelyticum que se caracteriza por estar presente en la uretra, tener un pequeño tamaño, colonizarse, ser Aerobia.

Ante un incremento de esta flora bacteriana presente en todos los seres humanos de manera proporcionada, cuando el 70% produce una grave afección por ser adquirida en vía sexual.

Esta bacteria daña el tejido uretral invadiendo y destruyéndolo, en un primer momento esta desencadena una reacción inmunológica frente al organismo debido al daño en la uretra, luego se activan las células blancas en una primera línea de defensa por otra parte se preparan el sistema inmunitario para reconocerlo como tal o no. Luego de ser vencida la primera línea de defensa entran la segunda línea de defensa reconociendo al antígeno y atacándolo, podemos encontrar en la superficie de las células el HLA B27 que es una proteína denominada antígeno leucocitario humano B27 capaz de reconocer lo extraño.

También la participación del Linfocito T vírgenes se alojan en los órganos linfáticos secundarios donde pueden entrar en contacto con antígenos presentados por células dendríticas maduras sobre moléculas del CPH de la clase I o de la clase II, de esta forma son activas.

Los linfocitos T también pueden actuar de forma efectora, reguladora; linfocitos T efectores o más concretamente linfocitos Th son un subgrupo de linfocitos (a su vez un tipo de leucocito) que tienen un papel muy importante en establecer y maximizar las capacidades de defensa del sistema inmunitario. La actividad de estas células es inusual, en tanto no son capaces de producir efectos citotóxicos o fagocitarios, es decir, no pueden aniquilar la célula huésped o patógenos. Sin la ayuda de otras células inmunitarias se consideran inútiles contra una infección. Los linfocitos Th están involucrados en el activamiento y dirección de otras células inmunitarias, y son particularmente importantes en la respuesta inmune adaptativa. Son esenciales en el proceso de conmutación para la posterior formación de anticuerpos por parte de los linfocitos B, en la activación y crecimiento de los linfocitos T citotóxicos, y en el aumento de la actividad bactericida de fagocitos como los macrófagos.

Conclusiones:

Finalmente he podido concluir que este paciente presento un ureaplasma urealyticum estando comprometido el tejido de la uretra y células dianas pero a su vez hemos podido identificar que esto no provoco una inflamación pero produjo la alteración del sistema inmunitario del cual el HLA es parte importante para el reconocimiento de lo propio, además que el Linfocito T es indispensable para atacar y separar el tejido dañado y sano.

Referencia

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