Los Suelos Y La Tectónica De Placas

Los Suelos y la Tectónica de Placas: ¿Una Edafosfera en Permanente Expansión?

Publicado por Juan José Ibáñez el 3 abril, 2007

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El mes de marzo de 2007, diversas noticias nos informaron que los geólogos han detectado sólidas evidencias de que la tectónica de placas, motor de la geosfera, comenzó su actividad poco después del origen de la tierra. Del mismo modo, han encontrado las rocas más antiguas jamás registradas por el hombre (ofiolitas datadas con una edad aproximada de 3.800 millones de años). Tal noticia me ha dado pie a que ¡por fin! edite un post que llevaba pensando desde hace mucho tiempo. Como muchos sabéis, la Tierra, a escala geológica, atesora un dinamismo fantástico. ¿Y los suelos? Resulta que también. No he leído nada de lo que voy a contar hoy. Quizás sea novedad, tal vez se le ocurriera a otro colega. La cuestión es que, al parecer, la edafosfera ha ido incrementando su extensión superficial desde hace miles de millones de años, en un proceso más o menos continuo, aunque no gradual. En consecuencia, y con la salvedad de la relevancia que pudieran tener los procesos erosivos antrópicamente inducidos, hoy disfrutamos de más extensión ocupada con suelos que hace millones de años. ¿Por qué?

La Tectónica de Placas

Fuente Wikipedia

La Tectónica de Placas es uno de los mayores descubrimientos de la geología contemporánea. Cuando uno era estudiante de bachiller (años 60), la mencionada disciplina resultaba un tanto aburrida y especialmente estática. Sin embargo, los jóvenes de ahora pueden disfrutar de una geología más divertida y menos inmóvil. ¿Pero que tiene que ver esta desiderata con los suelos? Resulta que Mucho. Ya lo iréis viendo cuando tenga tiempo de describiros la edafosfera era por era, desde el origen del planeta. Tema apasionante, pero que me acarreará mucho trabajo.

Para entender el razonamiento, comenzaremos con una palabra clave: “acrecimiento”. Según wikipedia, tal vocablo: “es un término que se utiliza para nombrar el crecimiento de un cuerpo por agregación de cuerpos menores”. Pues bien tanto la “Corteza Continental”, como la edafosfera son entidades sometidas a tal tipo de evolución, por las mismas razones. Resulta trivial que si la corteza emergida aumenta de extensión, también lo harán los suelos que la recubren.

Los continentes han ido creciendo en tamaño por un proceso denominado “acreción continental”. No vamos a explicar aquí, los mecanismos de “acreción continental”, por cuanto os estamos ofreciendo los enlaces para que indaguéis vosotros. Del mismo modo, no es una materia de estudio que, “directamente”, concierna a esta weblog. Tan solo debéis saber que la corteza litosférica crece a partir de las dorsales meso-oceánicas y vuelve a subsumirse en el manto, de donde procede,

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