MONOGRAFIA LA REDACCION Y SU PROCESO DE PLANIFICACIÒN

I.- INTRODUCCIÓN.-

El Discurso es una reflexión. El Diccionario de la Lengua de la Real Academia nos ayuda a entender que un discurso es la facultad de usar la mente (el razonamiento) para reflexionar o analizar los antecedentes, principios o señales de cualquier asunto con el fin de extenderlo. Por consiguiente cuando reflexionas, estás discursando, aplicando la inteligencia, para entender un tema y hasta de ser capaza de explicarlo a otras personas. Es una tarea que se realiza en el interior de nuestra mente, una línea de razonamiento que sigues al igual de deducir los asuntos.

Cuando exponemos lo resultados de esas reflexiones, ya sea ante una o varias personas para proveerles la información o para que nos ayuden a reflexionar, decimos que estas están presentando un discurso público o delante de ellas, lo que significa que los que nos escuchan usan su inteligencia para entender lo que decimos.

Un discurso es una línea de razonamiento que nos ayuda a discernir o entender un asunto, así como para explicarlo a otros. Por lo tanto es un conjunto de palabras para manifestar lo que se piensa o se siente, de la cual se expone el razonamiento dirigido a otra persona.

II.- EL DISCURSO.-

El latín discursus, un discurso es un mensaje que se pronuncia de manera pública. Se trata de una acción comunicativa cuya finalidad es exponer o transmitir algún tipo de información y, por lo general, convencer a los oyentes.

Por ejemplo: “El gobernador sedujo a los empresarios con un discurso muy convincente”, “Ya basta de discursos: es el momento de actuar”, “El discurso del gerente fue recibido con poco entusiasmo por los trabajadores en el marco de la convención”.

Un discurso es un acto de habla, y por tanto consta de los elementos de todo el acto de habla; en primer lugar, un acto ilocutivo o locucionario, es decir, el acto de decir un dicho con sentido y referencia; en segundo lugar, un acto ilocutivo o ilocucionario, o el conjunto de actos convencionalmente asociados al acto ilocutivo.

Cabe destacar que, para la lingüística, el discurso puede ser oral o escrito. Esto quiere decir que algunos textos también pueden considerarse como discursos.

Para la filosofía, por otra parte, el discurso es un sistema de ideas que se construye de manera social. En este contexto, puede hablarse del discurso dominante en referencia a aquellas representaciones que son impuestas por las clases superiores y que terminan siendo aceptadas o compartidas por la mayoría de la sociedad.

El discurso es un evento comunicativo social, realizado mediante el empleo de elementos lingüísticos. Es el mecanismo más efectivo para entablar comunicación con un determinado público y por ende, debe haber un vínculo previo entre el orador y el oyente o auditorio.

III.- CARACTERÍSTICAS

1. Entretener: Busca en el auditorio una respuesta de agrado, diversión y complacencia, con el propósito predominante de hacer olvidar la vida cotidiana, reflexión con sus pequeños sucesos y sus apremios basados en el humor. Ofrece grandes ventajas tanto al emisor como a los receptores, debido a la narración y a la expresión cultural que se utilice Se busca una respuesta de agrado por los participantes del auditorio y los temas son de libre opción.

2. Informar: Persigue la clara comprensión de un asunto, tema o idea que resuelve una incertidumbre o inquietudes. Su principal objetivo es de ayudar a los miembros del auditorio para que estos pretendan ampliar su campo de conocimiento. Su característica principal de este discurso es llevar a cabo la objetividad.

3. Convencer: Es influir sobre los oyentes acerca de verdades claras e indiscutibles que de poder se probadas y comprobadas, de esa manera se pone a prueba con la razón, pero tocando la emoción.

4. Argumentar: Lo que constituye una operación lógica que emplea elementos cognoscitivos y racionales; creando una actitud libre y reflexiva, con la ausencia de elemento positivo.

5. Persuasión: Aspira una respuesta de adhesión o acción, en donde define como un medio de influenciar la conducción a través de llamamientos dirigidos primariamente a emociones; constituye en la comunicación verbal un elemento clave ya que es la característica que se vale de las tres anteriormente mencionadas. Donde se manipula al individuo según sea su conveniencia.

6. Propósitos del discurso: Se considera a la respuesta precisa que el orador o el emisor desea obtener del auditorio, que desea que se cumplan sus necesidades, por lo que el orador trata de obtener la comprensión de sus receptores para que haga, comprenda y disfrute del mensaje que le ha proporcionado el emisor.

IV.- ESTRUCTURA DEL DISCURSO

En el discurso debe primar la claridad y la brevedad, analizar el lenguaje utilizado, la estructura de las frases. Todo conlleva a que el discurso deba emplearse un lenguaje claro y directo, frases sencillas y cortas. Hay que facilitar al público su comprensión. La brevedad no implica que el discurso deba ser corto, sino que no debe extenderse más allá de lo necesario, “ir al grano”, evitar rodeos que sólo dificultan la comprensión y terminan aburriendo.

IV.1.- INTRODUCCIÓN.-

Plantea el tema que se va a abordar y la idea que se quiere transmitir de manera concreta, y objetiva, se busca dar claridad y orientación del tema a tratar.

o El orador o participante tomará una posición firme, decidido, con porte, mirando fijamente a su interlocutor, procederá a saludar, pero guardando siempre el orden jerárquico de ciertas personalidades que se encuentran en el lugar.

o Luego tendrá como objetivo plantear el tema que se va a abordar y la idea que se quiere transmitir, y ubicar el auditorio, en el lugar mismo donde se desarrollarán los hechos o acontecimientos.

o Es necesario y elegante que el orador haga pensar al auditorio, utilizando citas, ejemplos, pensamientos o experiencias personales, pero todo ello debe tener una relación con el tema que se va a tratar; se utiliza este método para que nuestro discurso se entretenido y no monótono y frío; es interesante mantener al receptor en una constante atención, de tal forma nos evitaremos pronunciar el nombre del tema.

o Nuestro discurso se pone más interesante cuando el auditorio procura adivinar qué tema va a tratar; si utilizamos este método en la medida que vamos hablando, más atención habrá de parte del receptor; importante de esta introducción es que debe

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