Método Inductivo

Método Inductivo

El método inductivo es una estrategia de argumentación basado principalmente en la inducción, como su mismo nombre lo indica, por eso actúa a partir de premisas particulares y de esta manera extra conclusiones de un tema tratado.

El método inductivo realiza amplias divulgaciones basadas en observaciones específicas. Porque el razonamiento inductivo proporciona evidencia, la misma que también proporciona la verdad de la conclusión.

Este método para su cumplimento sigue toda una serie de pasos, que inicia con la observación de hechos específicos y precisos, los mismos que son examinados, registrados y comparados, seguidamente organiza la información conseguida, fija patrones, realiza la respectiva propagación de información, para de esta manera, deducir de todo lo antes encontrado, una correspondiente teoría o explicación

Este método es uno de los más usados en el entorno científico, de un lado, es un método parcialmente flexible, por otro lado, es adecuado para la exploración. Este método se utiliza primordialmente para formar teorías e hipótesis.

El origen moderno de este método se extiende al trabajo del filósofo británico del siglo XVII Francis Bacon (1561-1626), especialmente a el trabajo Novum organum scientiarum (“Nuevos instrumentos científicos”) de 1620, en dónde especificó las reglas del método científico.

Esto era contrario a la tradición de Aristóteles en ese momento, que enfatizaba solo el razonamiento sobre las acciones. Así, mientras Bacon trató de mostrar la importancia del razonamiento inductivo, dejó en claro que se deben descartar muchas otras posibilidades para sacar conclusiones.

Heredando la tradición iniciada por Bacon, filósofos posteriores como David Hume (1711-1776), John Herschel (1792-1871) y John Stuart Mill (1806-1873), propuso una variedad de enfoques para plantear la inducción con un propósito exactamente científico.

Este método inductivo también afirma que sumando una serie de casos particulares se puede llegar a la conclusión de afirmar un universal es decir por ejemplo sumado determinadas características de un género podríamos afirmar que esta característica es compartida por todos los miembros de dicho género.

Por ejemplo, en el caso de las aves si quisiéramos sumar la característica particular que hace a un ave ser un ave podríamos decir que todas las aves vuelan, pero no es el caso ya que, como el pingüino, la gallina no lo hacen entonces podríamos afirmar que la característica particular compartida por todas ellas es que tienen plumas o también que su reproducción es a través de huevos, entonces se podrí afirmar que todas las aves se reproducen a través de huevos y tienen plumas

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