Parasitosis oportunista

[pic 1]UNIVERSIDAD DE GUAYAQUIL FACULTAD DE CIENCIAS MÉDICAS ESCUELA DE MEDICINA[pic 2][pic 3]

CÁTEDRA DE PARASITOLOGÍA

Nombres: Román Gago Daniela, Rodríguez García María, Salazar Altamirano Paola, Suárez Pazmiño Mayerli, Vásquez Alay Cindy, Vera Espinoza Helen

Fecha: 27-2-2021.        Grupo 3-9.

Subgrupo: 4

TEMA: Parasitosis oportunista

Según la Real Academia de Ingeniería, en su  versión electrónica del Diccionario Español de Ingeniería,  se refiere al parásito oportunista como un organismo con poder patógeno limitado, por lo que aprovecha para su anclaje y desarrollo infectivo, que el hospedador esté debilitado. Entre los oportunistas más frecuentes encontramos Toxoplasma gondii, Strongyloides stercoralis,  Sarcoptes scabiei (agente de la sarna), Entamoeba hystolítica, Giardia intestinalis, Plasmodium spp. y Trypanosoma cruzi. Como estos parásitos atacan a individuos con baja respuesta inmunológica, les es más fácil introducirse en el organismo y desarrollarse prácticamente sin que ninguna defensa trate de frenarlo, y en estas situaciones se comportan más agresivos, provocando incluso la muerte. En condiciones normales, con respuesta inmunitaria eficiente, es casi imposible que puedan producir la muerte. Entre las enfermedades de inmunodeficiencia más importantes donde estos parásitos se introducen es el VIH SIDA, este virus destruye determinadas células del sistema inmunitario. El VIH tiene la capacidad de distorsionar la epidemiología, producir manifestaciones clínicas atípicas, alterar las pruebas diagnósticas habituales y disminuir la capacidad curativa de los antiparasitarios. El parasitismo estimula la replicación viral, lo que añade una mayor inmunosupresión a la existente. Los parasitismos suelen tomar este carácter oportunista cuando la cifra total de linfocitos CD4 es inferior a 100-150/ mm3 . En personas adultas inmunosuprimidas, la giardiasis pasa de ser una infección asintomática, a presentar síntomas que van desde diarrea aguda, persistente, hasta crónica. Aunque este parásito no invade otros órganos, puede causar gran pérdida de líquidos y sales, ocasionando deshidratación. En el caso del Strongyloides stercoralis en las personas con un estado de inmunosupresión tienen mayor riesgo de presentar el síndrome de hiperinfección, en el que hay un aumento de estos gusanos en el intestino y estos se multiplican más rápido de lo normal. Este parásito puede migrar a otros órganos ocasionando complicaciones letales. Como método de prevención es recomendable la higiene de manos en el contacto con animales, especialmente gatos, y al manipular carnes crudas. Se procurará ingerir carnes suficientemente cocinadas. Las prevenciones de la exposición al parásito deben realizarse mediante el control sanitario.

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