Tolerancia y fatiga muscular

-Tolerancia muscular:

Está relacionada estrechamente con la capacidad condicional de fuerza de un grupo muscular de soportar la fatiga ante un determinado número de contracciones. Representa la capacidad que tiene un músculo para ejercer una fuerza o tensión máxima frente a una resistencia la cual puede ser dinámica, isométrica o explosiva.

La tolerancia muscular se desarrolla mediante contracciones musculares que generan la suficiente tensión para producir un grado apropiado de hipertrofia muscular. Este proceso deber seguir el principio de sobrecarga. Los tipos de contracciones musculares pueden ser isotónicas, isométricas e isocinéticas. Las contracciones isotónicas incluyen una combinación alterna de las concéntricas (acortamiento, miométrica, trabajo positivo) y excéntrica (alargamiento, trabajo negativo). 

Comúnmente se entrena empleando ejercicios con resistencias donde se expone al músculo a una tensión máxima o cerca del máximo (con mucho peso en el caso de utilizar pesas). Por lo general, se utilizan pocas repeticiones (3-10 repeticiones). 

-Fatiga muscular:

La fatiga muscular es la imposibilidad de continuar debido a su intensidad o nivel de adaptación un trabajo o esfuerzo físico, o de realizarlo al mismo ritmo con el que se llevaba a cabo, esto puede venir dado por factores fisiológicos, orgánicos y psíquicos. El grado de fatiga presenta diferencias entre las personas, aspectos como la motivación y el respaldo fisiológico pueden generar variaciones, pero en general, la fatiga muscular es una respuesta o mecanismo de aviso que puede prevenir una lesión por esfuerzo excesivo en todo el cuerpo o solo en un segmento del mismo.

La fatiga muscular es un estado transitorio que se va produciendo de forma progresiva a medida que van apareciendo diversos factores como fallos en el aporte energético o de oxígeno, alteraciones en la actividad enzimática, desbalances electrolíticos, desequilibrio ácido-básico, defectos en la homeostasis de macro y micronutrientes y acumulo de metabolitos.

Todos estos factores dependen a su vez de una cantidad de circunstancias, como lo pueden ser el tipo de ejercicio, la intensidad, el tipo de contracción muscular que se esté llevando a cabo, los cuales pueden suponer variaciones en la alteración de los requerimientos nutricionales y energéticos para tener un adecuado nivel de rendimiento físico.

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