Tratamiento del estrabismo con toxina botulínica a menores

Tratamiento del estrabismo con toxina botulínica a menores

  “Tratamiento del estrabismo con toxina botulínica” es un artículo científico, también llamado paper, un tipo de texto de carácter académico, publicado entre Julio y Agosto del año 2000 en la Revista de Mexicana de Pediatría, por su autora la Dra. Silvia Moguel Ancheita.

  En el texto de temática médica, se habla sobre la efectividad de tratar el estrabismo con toxina botulínica en niños, gracias a un experimento realizado a 34 pacientes menores del “Departamento De Estrabismo del Centro Médico Nacional”

   Las palabras clave de este artículo científico son: Toxina Botulínica y Estrabismo en Enfermedades Sistémicas.

   El objetivo de este experimento era probar si, al inyectar toxina botulínica (neurotoxina) a los pacientes con enfermedades sistémicas en el músculo extraocular, ésta lograba combatir el estrabismo que ellos padecían, gracias a su efecto paralizante que, siendo controlado, es capaz de actuar de forma selectiva en las terminales nerviosas colinérgicas, esto produce el bloqueo de salida de acetilcolina, lo que provoca la disminución del calibre de la neurona motora y la velocidad de conducción , por ende además de la actividad muscular.

  Este tratamiento en particular, busca disminuir el riesgo de la aplicación de la neurotoxina de manera retrobulbar, reemplazando este método por la técnica de aplicación directa transconjuntival de la toxina botulínica. Disminuir el grado de invasión orbitaria quiere decir que es posible llevar a cabo el proceso en pacientes no ambulatorios y que presentan enfermedades sistémicas, inestables o sin un pronóstico definido, además del estrabismo, lo que no les permite llevar a cabo el tratamiento quirúrgico más común para esta alteración ocular.

  Para proceder a utilizar el nuevo tratamiento incluyeron 34 pacientes estudiados por 3 años, que padecían de estrabismo asociado a alguna enfermedad sistémica, se les realizaron distintas evaluaciones, como el tipo de estrabismo y su causa, la relación entre la alteración y la enfermedad del paciente, toma de agudeza visual con cartilla de Snellen, entre otras.

  Habiendo obtenido todos los resultados, se procedió a realizar la aplicación a los menores y, habiendo terminado con todos los pasos a seguir, les hicieron un seguimiento durante un año.

  Las respuestas en los niños fueron variadas según sus distintas enfermedades, pero la mayoría de estas fueron positivas, ya que, en 26 pacientes de los 34, la alteración fue eliminada en su totalidad o disminuida en gran porcentaje.

Algunas de las enfermedades sistémicas o síndromes que no respondieron bien al tratamiento aplicado fueron la Cardiopatía congénita, el Síndrome de Down, fractura Le Fort III y exotropía.

 En cambio, en otros casos como Prematuridad, un segundo caso de Cardiopatía congénita, Hidrocefalia, Neurocisticercosis o Crisis convulsivas, no hubo mayor problema para obtener las respuestas esperadas.

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