ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Yo Robot


Enviado por   •  2 de Junio de 2015  •  Síntesis  •  1.261 Palabras (6 Páginas)  •  275 Visitas

Página 1 de 6

Yo, robot

Isaac Asimov

Título original:

I, robot

Los robots de Isaac Asimov son máquinas capaces de llevar a cabo

muy diversas tareas, y aunque carecen de libre albedrío, se plantean

a menudo a sí mismos problemas de "conducta humana", en

situaciones que serían recreadas más tarde por muy distintos

autores. (Véase "El alma del robot", de B. J. Bayley). Pero estas

cuestiones se resuelven en "Yo, robot" en el mbito de las tres leyes

fundamentales de la robótica, concebidas por el mismo Asimov, y

que no dejan de proponer extraordinarias paradojas, que a veces

pueden explicarse por errores de funcionamiento y otras por la

creciente complejidad de los "programas". Estas paradojas no son

sólo ingeniosos ejercicios intelectuales sino y además una fascinante

indagación sobre la situación del hombre actual en el universo

tecnológico y en relación con la experiencia del tiempo y la historia.

Isaac Asimov nació en 1920 en la Unión Soviética, y es doctor en

bioquímica. Algunas de sus obras de ficción más importantes

aparecieron en las revistas populares del género en la década de los

cuarenta.

Traducción de

Manuel Bosch Barrett

Primera edición: marzo de 1975

Novena reimpresión: junio 1984

Colección Nebulae N.o 1

Edhasa/Ciencia Ficción

Edhasa, 1975

Avda. Diagonal, 519-521

Barcelona 29

Impreso por Romany /Valls

Verdaguer, 1 Capellades

(Barcelona)

I.S.B.N.: 84-350-0121-0

Depósito legal: B. 21.134-1984

Las tres leyes robóticas

1. Un robot no debe dañar a un ser humano o, por su inacción,

dejar que un ser humano sufra daño.

2. Un robot debe obedecer las órde nes que le son dadas por un

ser hu mano, excepto cuando estas órdenes están en oposición

con la primera Ley.

3. Un robot debe proteger su propia existencia, hasta donde esta

protec ción no esté en conflicto con la primera o segunda Leyes.

Manual de Robótica

1 edición, año 2058

Introducción

He revisado mis notas y no me gustan. He pasado tres días en los

U.S. Robots y lo mismo hubiera podido pasarlos en casa con la

Enciclopedia Telúrica.

Susan Calvin había nacido en 1982, dicen, por lo cual tendrá ahora

setenta y cinco años. Esto lo sabe todo el mundo. Con bastante

aproximación, la "U.S. Robots & Mechanical Men Inc." tiene también

setenta y cinco años, ya que fue el año del nacimiento de la doctora

Calvin cuando Lawrence Robertson sentó las bases de lo que tenía

que llegar a ser la más extraña y gigantesca industria en la historia del

hombre. Bien, esto lo sabe también todo el mundo.

A la edad de veinte años, Susan Calvin formó parte de la comisión

investigadora psicomatemática ante la cual el Dr. Alfred Lanning, de la

U.S. Robots, presentó el primer robot móvil equipado con voz. Era un

robot grande, basto, sin la menor belleza, que olía a aceite de

máquina y destinado a las proyectadas minas de Mercurio. Pero

podía hablar y razonar.

Susan no dijo nada en aquella ocasión; no tomó tampoco parte en

las apasionadas polémicas que siguieron.

Era una muchacha fría, sencilla e incolora, que se defendía contra un

mundo que le desagradaba con una expresión de máscara y una

hipertrofia del intelecto. Pero mientras observaba y escuchaba, sentía

la tensión de un frío entusiasmo.

Se graduó en la Universidad de Columbia en el año 2003, y empezó

a dedicarse a la Cibernética.

Todo lo que se había hecho durante la segunda mitad del siglo

veinte en materia de "máquinas calculadoras" había sido anulado por

Robertson y sus cerebros positónicos. Las millas de cables y

fotocélulas habían dado paso al globo esponjoso de platino-iridio del

tamaño aproximado de un cerebro humano.

Aprendió a calcular los par metros necesarios para establecer las

posibles variantes del "cerebro positónico"; a construir "cerebros"

sobre el papel, de una clase en que las respuestas a estímulos

determinados podían producirse muy aproximadamente.

En 2008, se doctoró en Filosofía e ingresó en la U.S. Robots como

"robopsicóloga", convirtiéndose en la primera gran practicante de esta

nueva ciencia. Lawrence Robertson era todavía presidente de la

corporación; Alfred Lanning había sido nombrado director de

investigaciones.

Durante quince años vio cómo cambiaba la dirección del progreso

humano, y avanzaba vertiginosamente.

Ahora se retiraba... hasta donde podía. Por lo menos,

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (9 Kb)
Leer 5 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com