La relación evaluación y enseñanza en el contexto educativo del siglo XXI

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UNIVERSIDAD “BENITO JUÁREZ G.”

Doctorado en Educación

Módulo

Investigación de la Evaluación del Conocimiento

Ensayo

La relación evaluación y enseñanza en el contexto educativo del siglo XXI

Doctorante: Shirley Tatiana Venegas Vásconez

        Tutor: Dra. Marisol Cipagauta

México, 2023

La relación evaluación y enseñanza en el contexto educativo del siglo XXI

El papel de la educación en el siglo XXI, ha cambiado de forma muy acelerada, ya que demanda de los actores del sistema una actitud crítica, reflexiva, innovadora. De acuerdo con Colorado y Morales (2018), estos escenarios actuales en los que se desenvuelve la educación son fundamentales para el desarrollo de diferentes proyectos con incorporación de tecnología, con características de cada entorno, así como con características cognitivas, sociales y hasta culturales que poseen los estudiantes.

Las competencias de este siglo, se transforman en una parte central de la enseñanza y van de la mano las necesidades de evaluación, la misma que tiene como propósito determinar en qué medida se ejecutan las metas que se fijan para que puedan cumplirse los estándares asociadas a los aprendizajes que se espera logren los estudiantes a su paso por la institución educativa y que constituye la enseñanza que se impartió.

Desde esta perspectiva, se evidencia como el concepto de evaluación, está íntimamente relacionado con el de enseñanza cuando en el proceso educativo se emite el conocimiento desde el docente y este debe recibir señales de que fue adquirido por parte del alumno, es así que, muchas prácticas educativas se estructuran en función de la evaluación, tras ser ésta uno de los estímulos en la adquisición del aprendizaje.

De manera general, los profesores tienen la creencia que todo lo que enseñan en el salón de clases es aprendido eficiente y efectivamente por parte de los estudiantes, en este sentido, es a través de una correcta evaluación, las respectivas técnicas e instrumentos alineados al currículo y sus componentes los que emitirán resultados útiles para la toma de decisiones.

Sin embargo, este tema de la evaluación y su relación con la enseñanza en el contexto actual, ha generado una fecunda línea de estudios e investigación que abarca un amplio abanico de aspectos, posturas, teorías subyacentes y prácticas. En el aula, la evaluación ocupa un papel relevante, aunque para los alumnos esté asociada con los preocupantes exámenes y posteriores calificaciones y para los profesores se trata de una preocupación que suscita debate y muchas dudas; con frecuencia, lo sienten como una imposición ingrata y externa al aula, al referirla a plantillas, exámenes, notas y reuniones interminables (Fernández, 2017)

Poco a poco el contexto actual en referencia a la evaluación va permitiendo que se entienda a esta más como un proceso que permite valorar y regular los procesos de enseñanza, los mismos que posibilitarán el progreso convirtiéndose en una mejor guía para los cambios que se deban implantar, ya que esta factible de ser aplicada en cualquier momento del proceso de enseñanza.

De esta manera, se la va generando una compresión de la evaluación puesto que no debe ser algo arbitrario, sino un acto en pro de compartir experiencias de sobre la enseñanza y que estas se las pueda ir mejorando; es así, que la enseñanza proporciona un sin fin de herramientas para concretar el aprendizaje que deben adquirir el estudiantado.

Uno de los elementos fundamentales del proceso de enseñanza-aprendizaje, la evaluación, también se ha transformado para adaptarse a esas necesidades actuales del siglo XXI; en referencia con la enseñanza, se la considera como un proceso para la mejora de la calidad del estudiante, del docente y de la institución educativa.

La evaluación en relación con la enseñanza ahora, también está travesando momentos difíciles al instaurarse como una obligación o requerimiento ligado a cuestiones de certificación lo que pude llevar a perder de vista elementos esenciales en ella (Lieberman y Wilkins, 2006 citado por Martínez et. al 2018). Por ello, debe ser entendida como un proceso sistemático, dinámico y continuo de todo sistema educativo, en el que se pone a prueba sus principios y propósitos; inicia con la planeación estratégica educativa, forma parte de los componentes curriculares y termina con la puesta en práctica del plan de mejora reflejado en la transformación educativa.

Actualmente hay que considerar a la evaluación como extensión de la enseñanza, como una actividad continua, integradora que desde la reflexión genera experiencias y oportunidades formativas, reflexionando que es sin duda una acción dentro del proceso de enseñanza que ofrece un balance periódico para reconocer cómo se concretan esos conocimientos, hasta dónde se avanzó; también considerada en cierta medida como parte del nivel de competencia del servicio que se ofrece la institución frente a las demás, permitiéndoles ingresar con sus resultados a la verdadera construcción de su identidad.

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