Nueva Escuela Mexicana

Había una vez en algún lugar del planeta un nuevo programa muy ambicioso lleno de cosa nuevas y no tan nuevas llamado la  Nueva Escuela Mexicana, un grupo de docentes, instituciones educativas y alumnos entusiasmados por aprender y crecer como personas estaban llenas de expectativas ya que en este nuevo proyecto se promovía el humanismo como uno de los valores fundamentales, en el cual se valoraba la importancia de cada individuo y se buscaba su desarrollo integral,  la dignidad y los derechos de todos los estudiantes. Los maestros se esforzarían por crear un ambiente inclusivo y respetuoso, donde cada alumno se sintiera valorado. También se fomentaba la empatía y la solidaridad entre ellos, promoviendo la colaboración y el apoyo mutuo.

El proyecto era demasiado ambicioso ya que la excelencia tenía un significado distinto al de otras propuestas ya que el principal objetivo era desarrollar habilidades emocionales y sociales, autonomía. Se buscaba que los estudiantes tuvieran un pensamiento crítico y que ellos fueran los protagonistas de su propia historia de aprendizaje.

Pronto llego el gran día, y en una escuela de este gran lugar se encontraban las aulas llenas de emoción y expectativa, los maestros ansiosos y llenos de nerviosismo ya que se llevaría a cabo una actividad para promover el desarrollo del pensamiento crítico y la autonomía del alumnado. Los alumnos se encontraban emocionados por la libertad que tenían para elegir y trabajar en aquello que era de su interés y se podrían expresar de manera libre.

 En esa escuela se encontraba la docente Isabel quien era una docente de preescolar preocupada por brindar estrategias a sus alumnos, el proyecto le parecía fantástico y más porque en cierta manera tendrá la facilidad y autonomía de llevar a cabo sus proyectos y así mismo poder darles a sus alumnos cierta autonomía para trabajar y aprender. En su grupo se encontraba Fatima, una estudiante muy curiosa, inteligente, entusiasta, divertida, etc. quien eligió investigar sobre los animales, en especial sobre sus mascotas. Tras realizar una breve investigación, Fatima se preparó para presentar su exposición ante sus compañeros. Durante su presentación, demostró un gran dominio del tema y logró captar la atención de todos a pesar de su corta edad. Después de la exposición, los demás estudiantes compartieron sus opiniones. Isabel se sitio muy satisfecha ya que al ser un tema elegido por ella lo había desarrollado satisfactoriamente y además sus compañeros estuvieron interesados al ser un tema del agrado de ellos también. Isabel felicitó a cada uno de los alumnos por su participación y los motivo a seguir investigando y desarrollando su autonomía y pensamiento crítico para así construir su en el aprendizaje. Les recordó que el humanismo y la excelencia eran valores fundamentales para llegar a contribuir a su entorno familiar y social y de esta manera también a su comunidad. Y es así como docentes en pequeños y grandes colegios, instituciones de educación están confiando en que el gran proyecto, modelo, programa, etc. Que es llamado la Nueva Escuela Mexicana, les brinde a ellos y sus estudiantes un humanismo, excelencia y la autonomía para formarlos en este lugar, cada alumno sea valorado y estimulado para buscar su propio camino y desplegar su máximo potencial al igual que los docentes como Isabel que cree que la educación es el cambio que modificara al mundo.

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