Me gusta vivir en Baracoa

Me gusta vivir en Baracoa
Mi nombre es Jorge Vidal. Tengo 37 años. Vivo en la ciudad de Baracoa. Pienso que Baracoa es muy bonita. Está rodeada de playas, de montañas y de ríos vírgenes con agua natural y limpia. Baracoa tiene paisajes preciosos. 

Vivo en un barrio tranquilo. Mis vecinos son muy simpáticos. En mi barrio nos cuidamos unos a los otros. En los momentos difíciles sabemos darnos la mano. Si yo por ejemplo tengo un familiar enfermo, o si tengo cualquier problema, los vecinos me ayudan con dinero, con medicina, con todo. Si mi bicitaxi está roto, o si me falta una pieza para la bici, el amigo que vive al lado dice: "Yo la tengo, no hay problema, tómala. Me la pagas más adelante".

Mi familia es pequeña. Yo tengo un niño de dos meses y una niña de ocho años. Ella estudia tercer grado. Mi esposa trabaja en el hospital. Todos los días yo trabajo de bicitaxista. También estudio los martes y jueves por la tarde. Cuando tengo tiempo libre me gusta pescar de la playa. 
       Todos los días me levanto a las cinco y media o las seis de la mañana. Tengo animales en casa y en una finca, y siempre les voy a dar comida al cochino y a las gallinas. También ayudo a mi esposa en la casa.

Soy un padre de familia
Normalmente desayuno a eso de las siete, me pongo la ropa para trabajar y voy al trabajo. Algunos días trabajo el bicitaxi hasta las cuatro o cinco de la tarde. A veces estoy en la calle hasta las ocho o las diez de la noche. Eso depende. Hay veces que puedes trabajar sólo cinco horas porque te sientes agotado y hay veces en que puedes trabajar diez o doce horas. 
      El bicitaxi que uso es de un amigo porque el mío está roto. Ahora no tengo la economía para arreglar mi bici porque he tenido que comprar la canastilla para mi bebé. Soy un padre de familia y mi economía es pequeña.

Aquí siempre hay trabajo para un bicitaxista. Siempre hay alguien que te dice: "Bici, vamos al hospital, "Vamos al mercado", "Vamos a la escuela" o "Vamos a la iglesia". Hay gente que va al trabajo y que va un poco tarde, y te dice: "Bici, me faltan diez minutos. Quiero ir al trabajo temprano". Y en diez minutos llega a su trabajo y te paga. Aunque no ganas mucho, hay bastantes clientes. Los turistas pagan mejor que los cubanos. Si un día llevo a un turista a la ciudad ida y vuelta, y me paga 10 CUC por el viaje, entonces ese día no necesito trabajar más.

Un trabajo duro

Como bicitaxista tienes que respetar las leyes de tránsito. Tú bici siempre tiene que estar en buena condición. Tienen que funcionar los frenos, los espejos y las luces. También es importante que el bicitaxi esté limpio y que el cliente esté cómodo en el asiento. Tengo la costumbre de lavar la bici los domingos, pero trato de mantenerla limpia todo el tiempo.

Llevo cinco años trabajando de bicitaxista. Es un trabajo duro, y no es bueno para la salud. Muchas veces te duele la espalda y te duelen las piernas. Estás expuesto al sol, al polvo y a la contaminación de los carros. Ahora soy joven, pero cuando sea más viejo, no puedo continuar. Por eso mi sueño es estudiar una carrera en la universidad. Pienso en un futuro estudiar ingeniería civil, y lo voy a hacer porque el estado cubano me ha dado esa oportunidad.

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