SHAKESPEARE Y EL TEATRO ISABELINO.

1. SHAKESPEARE Y EL TEATRO ISABELINO.

1. La época isabelina

La Reina Isabel I, hija de Enrique VIII y de Ana Bolena, ascendió al trono en 1558 y reinó durante cuarenta y cuatro años. En aquel momento, lograr mantenerse en el poder durante tan largo período significó consolidar cambios políticos, sociales y culturales.

Desde el punto de vista político la Reina Isabel tuvo la capacidad de someter y controlar todos y cada uno de los intentos de desestabilización que surgieron durante su mandato. Semejante logro no fue sencillo, si tenemos en cuenta que se encontró con una nación que comenzaba a dar sus primeros pasos hacia la formación de un estado, que parecía esta siempre al borde del colapso como consecuencia de problemas políticos y económicos.

Su consigna era la conciliación, pero cuando ésta no era posible no tenía ningún problema en mandar a quienes ella consideraba sus enemigos a la “Torre de Londres”, cuyo verdadero significado era la decapitación.

Ni siquiera la reina de Escocia,  María Estuardo,  se salvó de tal destino. Fue decapitada por orden de Isabel I. El hijo de María Estuardo, que se llamaba Jacobo , heredó el trono de Escocia. Sin embargo el trono debió esperar a que Jacobo alcanzara una edad adecuada para  ejercer el poder, pues era muy pequeño cuando ejecutaron a su madre.

Jacobo se transformará en Jacobo VI de Escocia y  luego de la muerte de la reina Isabel I, quien no tenía un sucesor directo al trono, Jacobo también  será coronado como Jacobo I de Inglaterra. Si bien Shakespeare desarrolla su arte en tiempos de Isabel, la obra "Macbeth" se estrena durante el reinado de Jacobo I.  

Cabe agregar, que la vida política y la religiosa estaban íntimamente relacionadas en esa época, ya que el poder se disputaba en estos dos ámbitos.

El teatro isabelino.

El brillo del teatro isabelino tiene sus puntos más altos en las figuras de Thomas Kyd, Christopher Marlowe y William Sakespeare. Estas figuras surgen como consecuencia del impulso que se le da a las actividades artísticas , en especial al teatro ,desde la iglesia, colegios y universidades, y en los esplendores de la corte.

Papel de la iglesia en el género dramático.

Desde la Edad Media la iglesia en Inglaterra produce ritos que tienen claros visos dramáticos. Por ejemplo en los siglos X y XI, la conmemoración de la crucifixión de Cristo, era seguida de una ceremonia que representaba las distintas etapas de este hecho religioso, con un claro contenido dramático.

En este sentido corresponde mencionar:

Miracle plays:  los milagros, como el de la resurrección, permiten la  creación  dramática y se convierten en un género que se llama “Miracle plays”: obras de milagros. Éstas son actuadas dentro pero también fuera de la iglesia, en carromatos o en plazas públicas, en especial durante  las épocas de pascuas y navidad.

Moralities: las “Moralidades”  hacían hincapié, más que en los milagros en sí, en la lucha entre el bien y el mal. En cada una de estas piezas aparecen personajes que simbolizan la codicia, la generosidad, etc. Y hacen que estas “Moralidades” funcionen como alegorías de la Biblia.

Tanto los “Miracle plays” como los Moralities” forman parte de la tradición dramática en Inglaterra, muy arraigada ya en el siglo XIV. Esto permite que la gente de las grandes ciudades y de los pequeños pueblos, estén habituados a actuar o a ver obras de teatro.

El cambio más importante durante la época isabelina es que el teatro se vuelve secular.

Educación. Influencia en el género dramático.

En la época isabelina se estudian los autores clásicos, principalmente, y se estudian en sus lenguas originales, es decir: en griego y en latín.

Se enseña Retórica y los alumnos aprenden largos diálogos de memoria.

Para aprender las obras de autores como Séneca, Terencio o Plutarco, se recurre a la actuación. De esta manera los niños desde temprana edad acostumbran el oído a los distintos sonidos y ritmos de las diferentes lenguas ,y aprenden a la vez, a actuar sobre un escenario (objetivo didáctico).

Los maestros dirigen la actuación de sus alumnos, pero también escriben. En este sentido N. Udall escribió la primera comedia en inglés llamada “Roister Doister”.

Los  niños crecen y van a las universidades, continúan practicando la actuación y comienzan a escribir sus propias obras.

Cuando se impuso el idioma inglés como lengua nacional, las universidades lucharon contra ello y continuaron  representando sus obras en latín.

Las universidades mostraban con gran orgullo las obras que producían, al punto que expulsaban , a veces pagándoles, a las compañías de actores errantes que pasaban por Oxford o Cambridge.

Colegios de abogados.

Los colegios de abogados también organizaban sus eventos teatrales. Sin embargo, al revés de lo que ocurría en las universidades y colegios, el objetivo no era didáctico, sino simplemente de entretenimiento.

La primera tragedia en inglés fue puesta en escena y vista incluso por la Reina Isabel I; su nombre es “Gorboduc”  y pertenece  a los autores Thomas Norton y Thomas Sackville. El argumento de la misma es lo suficientemente sangriento como para atraer al público. Gorboduc es rey de Britania  y divide su reino entre sus dos hijos: Ferrex y Porrex. Los hijos se pelean y el menor mata al mayor. La madre, que quiere más al hijo muerto, mata al más joven en venganza.

La Corte Real

En la Corte, donde no hay demasiado para hacer, además de administrar y generar intrigas o actos de corrupción, el teatro cumple la función de entretener.

Ya en épocas del Rey Enrique VIII (padre de Isabel), existía el cargo de “Master of revel”: Maestro de diversión, que se ocupaba de contratar, leer, censurar  y pagar todo lo que tenía que ver con el entretenimiento.

Dos géneros se desarrollan durante la época isabelina para entretener a la Corte:  la máscara y el teatro.

La máscara es una forma semidramática , una especie de gran ópera o de espectáculo “musical”, similar a los musicales que hoy se ofrecen en Broadway.

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