Discurso público

“Amigas y amigos:

Hoy día, la poesía de nuestra América habla aquí con acento caribeño, como nos decía la ministra, y con notas martianas y mistralianas, al conferir el cuarto Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda a Fina García Marruz.

A pesar de que la señora Fina no pudo acompañarnos, el rumor de su obra llega hasta nosotros junto a los ecos de tantos escritores fundamentales: narradores, poetas, ensayistas, dramaturgos, que en Cuba nacieron y que llevaron el nombre y las letras de la mayor de las Antillas por América y el mundo.

El nombre de Fina García Marruz, el murmullo de sus versos apenas arrancados al silencio –ese silencio que, como ella ha dicho, hace posible la música y la poesía- nos trae también los nombres y las obras de su amado Cintio Vitier*, de Eliseo Diego, de José Lezama Lima, de Virgilio Piñera: de aquellos que crearon y mantuvieron vivo el fuego de la revista Orígenes cuando promediaba el siglo XX y transcurrían años trascendentales para Cuba y para América.

(* Esposo y compañero por más de 50 años.)

Pero también, más atrás, percibimos el eco poderoso del pensamiento y la poesía de José Martí, el apóstol de Cuba, a cuya obra ha consagrado tantos años y tantos esfuerzos Fina García Marruz, y que aún hoy, para muchos de nosotros, americanos del sur, es un vasto territorio por explorar y conocer.

Porque lo cierto es que la obra martiana pertenece ya a la América libre, y nuestra, por la que él, incluso, ofrendó su vida de cara al Sol.

También Gabriela Mistral, otra de las preocupaciones críticas de Fina García Marruz, y quien animó tempranamente su vocación poética con amables dedicatorias y palabras de aliento en La Habana de los años 40 y 50, empieza a revelarse ahora como una geografía en la que tenemos mucho por descubrir.

El nuestro ha de ser el tiempo de enseñar a amar la obra martiana y mistraliana en nuestra tierra, en todas las tierras de América, los niños y los jóvenes conozcan más y mejor la obra de creadores como José Martí y Gabriela Mistral. Que nuestras universidades y bibliotecas abran mejores y mayores espacios y que sus palabras lleguen, siempre a los ojos y oídos de nuestra gente.”

(Fragmento de discurso de Michelle Bachelet en la Ceremonia de entrega del Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda, Valparaíso, 27 de julio, 2007)

3. El propósito del discurso es

a) criticar la entrega del premio a una escritora ausente.

b) felicitar a la ganadora del premio.

c) proponer una reflexión en torno a la poesía cubana.

d) referirse objetivamente a la obra de Gabriela Mistral y José Martí.

e) plantear a los receptores los principales problemas relacionados con la difusión de la literatura cubana y chilena.

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