Discurso Publico

En verano, Cuándo me vine a vivir a esta región yo la encontraba hermosa, y estaba entusiasmado por conocerla mejor. Era a fines de febrero y yo con mi mama empezamos a buscar colegio, lo cual eso no me gustaba mucho, ya que siempre en las pruebas para entrar al colegio me van mal, yo no quería entrar en este colegio por los rumores que me decían antes de que entrara, pero cuando me dijeron que si había quedado en este colegio ya no había vuelta atrás y mis papas estaban felices porque había quedado en ese colegio, lo cual yo no estaba muy contento, yo pensaba que mis compañeros eran de otra forma y que nunca iba a tener una buena relación con ellos, pero el primer día de clases en este colegio me recibieron brazos abiertos, pero yo no hablaba con nadie, no salía en los recreos y me quedaba adentro de la sala todos los días, porque yo pensaba que ms compañeros no me iban a incluir en su grupo, me sentía rechazado, y todos me preguntaban ¿ por qué no sales? ¿Por que eres tan tranquilo y calladito?

Y esto siguió por muchos meses. Hasta que yo me dije a mi mismo de que si yo no empezaba a compartir más con mis compañeros nadie lo iba a hacer por mí, así que esto empezaba a cambiar, y me fui dando cuenta de que mis compañeros no eran como yo lo pensaba, eran personas muy respetuosas, eran excelentes amigos y amigas.

Mi perspectiva del colegio cambio completamente y los amigos de mis papas siempre me molestaban por estar en este colegio, pero yo les conté mi experiencia y les dije que tienen que estar adentro de este colegio para realmente saber cómo son las personas.

Al cabo de dos años me di cuenta de que este curso en el que yo estaba era muy unido, este curso me encantaba y no quería irme, y cada vez estoy tomando más confianza en mis amigos y amigas, ya no soy el que se queda en la sala, sino soy el que sale a jugar, soy el que sale a conversar con mis compañeros y compañeras.

Pero hay algo que me causo mucha gracia…. Un día llegue en auto al colegio, lo cual mis compañeros no lo podían creer ya que ellos pensaban de que como alguien como yo iba a andar en auto, esto no lo tenía que saber nadie ya que no tenía licencia para conducir, pero aun así mis compañeros se subían conmigo y íbamos a andar por algún lado con la música a todo dar y vidrios abajo, sin duda, pasaron cosas épicas arriba de aquel auto. Pero al cabo de un mes raramente lo sabían casi todos los profesores, un día estábamos empezando la clase de historia, saludamos al profesor como corresponde y el profesor me mira y dice: ¿tú manejas? Yo le respondo con voz frágil y con un nudo en la garganta ¡SI!... el profesor con una mirada desafiante me dice: ¡yo te voy a demandar por manejar sin licencia!... yo quedo pálido, sin palabras, con la cara de mil colores. Todo esto termino cuando de el profesor sale una sonrisa y me dice: mentira y se ríe…. Yo sentí un

...