EL ZORRO Y EL PINGÜINO

EL ZORRO Y EL PINGÜINO

Un zorro era un tremendo campeón de las carreras, que de tanto ganar se había vuelto vanidoso, burlón y antipático. Su víctima un pequeño pingüino, que caminaba lento y era un poco torpe, esto no permitía que ni siquiera llegara a la meta en las carreras.

Un día el mono, quien era el encargado de organizar las carrera, anunció por todas partes que había una carrera y que el favorito para ganar era el pingüino. Todos pensaban que era un chiste, pero el vanidoso y burlón zorro se enojó y comenzó a burlarse del pingüino aún más. El zorro no quería participar, pero como todos iban a participar, el día de la carrera se unió al grupo y llegaron al lugar de inicio. El zorro fue todo el camino molestando al pingüino, que cuando llegara a la cima de la montaña bajaría y que rodando o resbalando sobre su barriga.

Pero, cuando llegaron a la cima todos se quedaron sorprendidos. La cima de la montaña era un cráter lleno de agua, como un lago. Entonces el mono dio la señal de salida y después dijo: “La carrera es cruzar el lago.” El pingüino se lanzó al agua y en el agua era más veloz que el viento y ganó la carrera por mucho y el zorro no pudo ni pasar el lago.

Aunque parecía que el pingüino lo estaba esperando para burlarse de él, el pingüino había aprendido de su sufrimiento y se ofreció a enseñarle a nadar.

Todos se divirtieron mucho en el lago ese día. El mono fue el más que se divirtió, porque fue el quien tuvo la idea de la carrera y darle una enseñanza al zorro.

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