En “La Casa de Bernarda Alba”, la opresión y el patriarcado

La Casa de Bernarda Alba

En “La Casa de Bernarda Alba”, la opresión y el patriarcado se presentan como temas principales a lo largo de la historia. El personaje de Bernarda representa el poder negativo en la casa que se convierte en uno de los conflictos más poderosos en el texto. Se utiliza el simbolismo para representar la opresión y dependencia ante los personajes al igual que la casa que hace el que el ambiente de la historia se defina. El autor utiliza diferentes técnicas para aclarar los temas y conflictos principales de la obra.

Después de la muerte de su esposo, Bernarda decide tomar el control sobre su familia. En lugar de reinventar el sistema y cambiar las reglas en su casa, ella decide actuar como el hombre de la casa y crea reglas injustas para sus hijas. Para satisfacer la tristeza de la muerte de su esposo, Bernarda decide vivir de luto por ocho años y no dejar salir a sus hijas de la casa durante ese tiempo. Al tomar control sobre la situación, muchos símbolos fálicos se presentan en la historia. El bastón de Bernarda y su escopeta al final de la obra crean más poder para Bernarda ya que refuerzan el patriarcado de la familia. El nombre de Bernarda también crea una forma de patriarcado ya que es un nombre muy masculino y utilizado raramente en una mujer. Bernarda igual se venga de sus hijas al quitarles lo que ella perdió al vivir la muerte de su esposo. Ya que ella no puede tener a un hombre que la ame en su vida, al encerrarlas y oprimirlas sexualmente, Bernarda les quita la oportunidad de ser amadas por un hombre. En la historia el personaje de Bernarda demuestra el hibris en la historia ya que su orgullo y poder causan todos los conflictos de la obra y los hacen más exagerados.

En la historia, los caballos y las yeguas aparecen como símbolos del trato y la diferencia en el pueblo de las mujeres y los hombres. El caballo se asocia al personaje de Pepe el Romano que caracteriza un personaje poderoso ante las mujeres. La prepotencia del caballo y su pasión amorosa son parecidos a aquellos de Bernarda y sus hijas. Cuando el caballo aparece golpeandose contra los muros se puede representar como un símbolo de la frustración sexual de los personajes y el encierro de las hijas en la casa. El calor también es un símbolo del calor y deseo sexual a lo largo de la historia. El insomnio causado por el calor también es una falta de sueño provocada por la pasión amorosa de las hijas y el gran deseo del hombre de todas las mujeres. La opresión en la que viven las hijas, provoca que la audiencia sienta afecto por las mujeres y viva con ellas el sufrimiento lo cual significa que es el pathos en la historia.

La diferencia entre los hombres y mujeres en la historia es un tema dominante a lo largo de la obra. Los hombres se apropian el poder y siempre son obsequiados con más privilegios que los personajes femeninos. De costumbre los hombres tienen el control sobre la familia y al Bernarda controlar a sus hijas de la manera que lo hace, enseña un trato injusto

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