LENGUA ORAL Y ESCRITA

LA ENSEÑANZA DE LA EXPRESIÓN ORAL Y ESCRITA EN LA ESCUELA SECUNDARIA

Una de las tareas más importantes de la escuela secundaria es lograr el desarrollo del lenguaje de los alumnos, sin él no hay desarrollo del pensamiento; y en ello tiene un importante papel el proceso de enseñanza-aprendizaje. Para alcanzar este propósito los maestros tienen que estar preparados, lo que les permitirá la solución de los problemas que surjan en dicho proceso. En su desempeño se manifiestan dificultades en el tratamiento teórico-metodológico de los aspectos: fónico, lexical y estructural de la lengua oral.

Quizás se considere la expresión oral una destreza complicada porque se trata justamente de diferentes competencias que muchas veces en teoría se pueden aislar pero que en la práctica están muy interrelacionadas.

La comunicación es un elemento esencial de toda sociedad y cada vez ante el gran desarrollo de los conocimientos. El hombre tiene que buscar estrategias que les permitan leer con mayor rapidez, para aprovechar y aplicar dichos avances en su desempeño diario. Aunado a ello, el Internet se convierte en un apoyo interesante, ya que podemos encontrar en su ámbito virtual, una gran cantidad de información muy diversa (documentos, artículos, metodologías, blogs, proyectos, web, entre otros), y donde podemos encontrar estrategias que pueden favorecer una formación más dinámica, integral y al mismo tiempo, desarrollar habilidades en los alumnos que faciliten su aprendizaje, que les ayuden a compartir sus ideas en estos espacios virtuales y que puedan ser competentes para expresarse de manera oral y escrita en los contextos adecuados.

El maestro durante su actividad docente debe lograr el desarrollo de la expresión oral de sus alumnos al propiciar que los mismos se expresen con espontaneidad, al estimular su expresión y ayudarlo poco a poco con procedimientos muy variados; crear en él hábitos de conversar, formular y responder preguntas, narrar, dramatizar y recitar; lograr que la expresión coherente, el orden de sus ideas, la articulación, la pronunciación, la entonación y el tono de voz correspondan al ciudadano del futuro. El maestro estará consciente de que su papel fundamental es dirigir, motivar y sugerir para que cada uno de sus alumnos sea capaz de hablar en el aula. Los elementos esenciales para la formación de hábitos idiomáticos que se deben tener en cuenta son: el maestro como modelo, la rectificación correcta y oportuna, la repetición por parte del alumno.

Aunque cueste reconocerlo, pienso que aun hay muchos docentes que siguen insistiendo en trabajar procesos tradicionalistas, que solo favorecen actitudes de aburrimiento, poca disposición hacia el estudio, poco interés y bajo nivel de motivación. Lo cual dificulta alcanzar aprendizajes significativos. Ahora requerimos de estrategias nuevas que ayuden a fomentar nuevas actitudes hacia el estudio, que le den significancia

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