LOS HORNOS DE HITLER Capítulo 1: 8 caballos o 96 hombres, mujeres y niños
Enviado por evanandreii • 5 de Mayo de 2019 • Documentos de Investigación • 2.643 Palabras (11 Páginas) • 1.220 Visitas
LOS HORNOS DE HITLER
Capítulo 1: 8 caballos o 96 hombres, mujeres y niños.
Iniciaba el año de 1944 en la capital de Transilvania; Klausenberg, como se le conocía.
En esta ciudad vivió un matrimonio de doctores: Miclos Lengyel y Olga Lengyel quienes tenían su propio hospital, también tenían dos hijos: Thomas y Arued, la ciudad estaba en medio de la segunda guerra mundial.
El oficial nazi que trato con ellos antes de arrestarlos, causaba temor en la población al contar lo que pasaba en los campos de concentración, se despidieron Masivamente A todos los judíos, quitándoles sus bienes y pertenencias. El doctor Lengyel fue traicionado por un médico que trabajaba en su hospital, él había visto su nombre en la lista de sospechosos y lo denuncio, después extorsiono a su esposa para que firmara los documentos donde les cedía el hospital y su casa, Olga decide firmarlos, ya que era tiempo de huir del pueblo por que ya había llegado la guerra, Olga, su esposo, hijos y abuelos llegaron a la estación de ferrocarriles solo aptos para 8 caballos donde solo podían entrar 96 personas por vagón.
Partieron sin saber a qué rumbo los llevarían, viajaron durante 3 días. Si querían comer o beber cedía sus prendas a los oficiales nazis. Tres personas murieron dentro del vagón pero eso no importo. Las puertas se abrieron hasta que llegaron a su destino.
Capítulo 2: La llegada
El tren se detuvo a la noche siguiente, al salir de los vagones, se presenciaba un olor a carne quemada. Todo estaba rodeado por alambres de púas electrificados, alrededor de 4000 a 5000 personas cabían por tren, separados por sexo, edad y vocación, los niños de un lado, ancianos de otro, para que hicieran trabajos más forzosos, los doctores a otro, las mujeres a otro, obligándolos a desnudarse, y fueron metidos a un hangar, Olga pudo pasar unas píldoras de veneno por si necesitaba alguna como último recurso, ella se encontraba en el campo de concentración de Birkenau.
Capítulo 3: La barraca 26
Se descubrió que Birkenau era la última parada de los campos de concentración y era un campo de exterminio donde las cámaras de gas y los hornos crematorios nunca dejaban de funcionar. La barraca 26 era una especie de establo donde se encontraban camastros y dormían de 16 a 20 personas, las barracas recorrían todo el campo y eran alumbradas por las noches por fuertes reflectores.
Capítulo 4: Las primeras impresiones
Un par de días después se les dio su primera comida, una bebida nauseabunda que llamaban café, a medio día una sopa con olor repugnante, y por la tarde un trozo de pan negro, las custodias pegaban a la menor provocación.
Irka una polaca que llevaba 4 años viviendo ahí le habla a Olga sobre los hornos y Olga descubre que habían andado a toda su familia a la cámara de gas, incluso a su hijo que no había sido seleccionado, Olga desesperada intenta localizar a su esposo, pues por su vocación de medico pudiera vivir en algún lado. Cuando ambos se encontraron se asombraron del rápido cambio que tuvieron, Miclos le pide una píldora de veneno pero después se arrepiente.
Al instante son descubiertos por soldados alemanes y los separan con gran brutalidad, al día siguiente todos los hombres fueron sacados del campo.
Capítulo 5: La llamada lista y las selecciones
Diariamente había dos llamadas a la lista; una al amanecer y otra a las 3 de la tarde, había 1400 mujeres en esa zona, 35000 en todo el campo y un total de 2000000 mil en toda el área de Birkenau. Todas eran obligadas a estar presentes en el llamado, sin importar a las que estuvieran muertas, las selecciones eran hechas por el doctor Mengerie, el doctor Klein, Irma Griese, y otros altos oficiales nazis, algunos iban para la cámara de gas y otros para industrias, se retiraban de 20 a 40 personas por barraca, se enviaban a promedio a la muerte de 500 a 600 personas por selección.
Capítulo 6: El campamento
Contaba con una avenida principal de 500 metros de largo, era flanqueada por 17 barracas por cada lado, las barracas eran retretes o lavabos y alguna guardaba alimentos, había una jefa por cada sección: blocobasmismas que disfrutaban de privilegios como alimentos, ropa y una esclava de las reclusas. Las mujeres peleaban para robar ropa deshilachada y las miserias de comida que sobraban.
Capítulo 7: Una proposición en Auschwitz
Olga conoció un polaco que sonreía a pesar del feo espectáculo que diario veía, llevaba 4 años en campos de concentración e iniciaron una amistad. Tadek invita un día a Olga a salir de la barraca y llevarla a un lugar donde otros reclusos cocinaban una papa, para Olga era imposible pues ningún alimento era para los prisioneros, Tadek quiso seducir a Olga pero ella se desilusiono de él, Tadek le dijo que la vida en los campos es horrible y todos tenían pequeños placeres el intercambiaba comida por sexo.
Olga encontró una estancia de mercado negro de favores sexuales a cambio de un pedazo de pan, un anciano remojaba su pan y encontró un pedazo de papa perro el señor no tenía dientes por lo que le dio su papa a Olga, cuando se la iba a comer se la arrebato otra mujer, y de nada servía reclamar.
Capítulo 8: Soy condenada a muerte
Después de unas semanas Olga es un esqueleto, por la temperatura y ataques de tos, y es seleccionada a la cámara de gas, Olga quería hacer reaccionar a sus amigas, Magda la acompañaba y Olga le dice que tienen que huir pero Magda la ignoro, en un descuido de los guardias Olga escapo y llego a otra barraca y de ahí regreso a la suya, la blocoba de su zona reconoció a Olga y le pidió sus botas a cambio de no decir nada.
Capítulo 9: La enfermería
Un día se anunció la creación de un hospital en la barraca 15, y Olga fue seleccionada para atender la enfermería, ahí llegaba a recibir más de 1500 enfermas, en promedio había 450 pacientes, pero escaseaba la medicina y el agua por lo que las operaciones se realizaban en un ambiente de suciedad.
Capítulo 10: Un nuevo motivo para vivir
Aunque el campo era de mujeres, había unos hombres, un francés al que Olga llamaba L, llego a convertirse en un visitante de la enfermería además era simpático y gracioso y daba noticias sobre la guerra, así Olga sabía lo que ocurría en Birkenau y Auschwitz.
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