La Edad Media
Enviado por Lopezer • 11 de Junio de 2015 • Apuntes • 360 Palabras (2 Páginas) • 125 Visitas
La Edad Media
...recorrer una parte del camino no significa equivocarse de
camino...
Transcurrió una semana sin que Sofía supiera nada más de Alberto Knox. Tampoco
recibió más postales del Líbano, pero hablaba constantemente con Jorunn de las que
habían encontrado en la Cabaña del Mayor. Jorunn estaba muy nerviosa, pero al no
suceder nada más, el susto iba quedando olvidado entre los deberes y el badmington.
Sofía repasó las cartas de Alberto muchas veces para ver si encontraba algo que
pudiera arrojar alguna luz sobre Hilde y todo lo que tenía que ver con ella. De esa forma
también tuvo la oportunidad de digerir la filosofía de la Antigüedad. Ya no le costaba
ningún trabajo distinguir entre Demócrito y Sócrates, Platón y Aristóteles.
El viernes 25 de mayo estaba en la cocina haciendo la comida para su madre, a punto
de volver del trabajo. Eso era lo acordado para los viernes. Ese día preparaba una sopa
de sobre de pescado, con albóndigas y zanahorias. Muy sencillo.
Había empezado a soplar el viento. Mientras removía la sopa, Sofía se volvió hacia la
ventana y miró fuera. Los abedules se balanceaban como espigas de trigo.
De repente algo golpeó el cristal de la ventana. Sofía se volvió de nuevo y descubrió
un trozo de cartón pegado en el vidrio.
Se acercó a la ventana y vio que era una postal. A través del cristal pudo leer: «Hilde
Møller Knag c/o Sofía Amundsen... »
Justo lo que había pensado. Abrió la ventana y recogió la postal. ¿Habría llegado
volando desde el Líbano?
También esta postal tenía fecha del viernes 15 de junio.
Sofía quitó la cacerola de la placa y se sentó junto a la mesa de la cocina. La postal
decía:
Querida Hilde. No sé si esta postal te llegará el día de tu cumpleaños. Espero que
así sea o que si no, al menos, no hayan transcurrido demasiados días. Que transcurra
una semana o dos para Sofía no significa necesariamente que transcurra tanto tiempo
para nosotros. Yo volveré a casa la víspera de San Juan. Entonces nos sentaremos
juntos en el balancín mirando al mar, Hilde. Tenemos tantas cosas de qué hablar.
Abrazos de tu papá, que a veces se deprime por ese conflicto de mil años entre
judíos, cristianos y musulmanes: constantemente me obligo a mi mismo a recordar que
...