La casa de Bernarda Alba - Análisis

LA CASA DE BERNARDA ALBA

Hay diferentes relaciones o simbologías que tiene el agua en la obra de Federico García Lorca, por ejemplo, en el primer acto Bernarda habla del agua del pozo, refiriéndose a la muerte, por el agua estancada en estos, sus impurezas, que es todo lo contrario del agua que habla María Josefa, esa agua pura del mar que se refiere a la vitalidad.

También significa esa sed de pasión, ese deseo sexual de las mujeres que están encerradas y no han conocido hombre alguno, Adela y Martirio tienen sed cuando Bernarda manda a cerrar las puertas y ventanas de la casa, ya que no pueden ver a los hombres del pueblo y representan ese deseo sexual con la sed y bebiendo agua.

Otro ejemplo es cuando Martirio bebe agua al saber que Pepe no va a llegar esa noche a visitar a su hermana Angustias, ya sabemos que Martirio también tienen intenciones amorosas hacia él; Adela tiene sed ya que está enamorada de Pepe, el río repleto de agua es la vida y Adela muere “Ahogada” por ese deseo que la llevó hasta aquella situación desafortunada por un amor que no era posible.

El agua de río para Bernarda es algo muy malo, cosa que no se puede hablar por pudor, por la misma razón de que en la casa solo habitan mujeres y hablar de hombres es un pecado, porque produce esa sensación de deseo hacia ellos; además en aquella época hablar de sexo no era bien concebido.

Las fuerzas que mayormente entran en conflicto en la obra era el principio de autoridad encarnado por Bernarda y el principio de libertad representado por las hijas. por la necesidad consiguiente de defenderse aislándose de esa vigilancia social y alienante que su madre les impuso, no consiguiendo ser “Libres” de escoger su destino, de hacer su vida casándose con un hombre.

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