Las 25 Herramientas
Enviado por marielcossuribe • 20 de Mayo de 2012 • 1.132 Palabras (5 Páginas) • 439 Visitas
KNOWLEDGE MANAGEMENT
En la última década ha ido apareciendo y consolidándose con fuerza una nueva disciplina focalizada sobre el ámbito de las organizaciones: la Gestión del Conocimiento. Esta disciplina se encarga de diseñar sistemas y estrategias para aprovechar de forma sistemática el conocimiento involucrado en una organización. La aplicación de la Gestión del Conocimiento al contexto de las empresas ha supuesto una importante fuente de ventajas competitivas que puede garantizar el correcto funcionamiento y la supervivencia de las mismas en el actual escenario económico caracterizado por la dura competencia y globalización de mercados.
No es fácil definir qué es la Gestión del Conocimiento. No existe una definición consensuada y compartida por toda la comunidad científica (Nonaka y Takeuchi 1995; Davenport y Prusack 1998; Boisot 1998; Sveiby 2001; Wilson 2002).
Como punto de partida, hay que señalar que es difícil hablar de Gestión del Conocimiento en abstracto. Siendo estrictos, sólo tiene sentido hablar de Gestión del Conocimiento en el contexto de una organización.
En un sentido lato, una organización es cualquier comunidad o conjunto de individuos cuyos miembros se estructuran y se articulan para cubrir unos objetivos determinados. El paradigma de organización suele ser la empresa, pero a la luz de esta descripción también pueden considerarse organizaciones otras comunidades de individuos (sin unos objetivos tan crematísticos) como un hospital, una ONG, un centro educativo, un ministerio, un centro de investigación o un partido político.
Teniendo en cuenta esto, en un sentido intuitivo, la Gestión del Conocimiento se encarga de diseñar e implementar sistemas cuyo objetivo es identificar, capturar y compartir sistemáticamente el conocimiento involucrado dentro de una organización de forma que éste pueda ser convertido en valor para esa organización. El conocimiento, en este contexto, es toda aquella información metabolizada o asimilada por un sujeto y orientada a la acción. O dicho en otras palabras, conocimiento es todo aquel estado mental (una disposición neuronal concreta, en definitiva) que posee un sujeto, que ha sido causado por una información determinada y que le permite a ese sujeto en cuestión la toma adecuada de ciertas decisiones y la realización de unas acciones concretas derivadas de esas decisiones (Audi 1988; Crayling 1998). Por otro lado, el conocimiento se convierte en valor para una organización cuando éste logra contribuir de una manera clara a la consecución de los objetivos que persigue la propia organización.
Es posible enriquecer y hacer más operativa y funcional esta primera definición intuitiva de Gestión del Conocimiento si tenemos en cuenta que existen distintos tipos de conocimiento dentro de una organización, y que, por tanto, es imprescindible respetar la especial naturaleza de cada uno de ellos para poder diseñar la gestión más adecuada.
En este sentido, es posible distinguir 6 tipos de conocimiento dentro de una organización. Estos 6 tipos pueden ser presentados agrupándolos en las siguientes tres parejas:
(a) Conocimiento Tácito / Conocimiento Explícito
(b) Conocimiento Individual / Conocimiento Organizacional o Corporativo
(c) Conocimiento Interno / Conocimiento Externo
Comencemos abordando la primera de las parejas. El conocimiento tácito se corresponde con ese conocimiento basado en la experiencia personal y en muchos casos se identifica con las habilidades del sujeto. Su principal característica es que es difícilmente transmisible o comunicable y, por tanto, que no es accesible a otros individuos de una forma directa. Para señalar que alguien, A, posee un conocimiento de este tipo solemos utilizar la expresión “A sabe P” (donde P acostumbra a ser un verbo). Así, saber nadar, saber ir en bicicleta,
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