Las Chingonerias De La Vida

Es común que las cosas más importantes pasen desapercibidas porque están ahí todo el tiempo, porque nos hemos acostumbrado a ellas. Uno de los elementos más importantes para la vida y los seres humanos es uno de ellos: la luz. Sustento de la vida del planeta e indispensable para el ser humano, hemos extendido la luz por las noches para extender los períodos de vigilia e iluminar las ciudades y ambientes en que vivimos.

El Museo de la Luz de la UNAM toma como objeto de exposición y difusión este elemento ubicuo en la vida de todos los días: desde la naturaleza física de la luz hasta los instrumentos con que la percibimos pasando por los colores, las estrellas, los ecosistemas y su interpretación en las artes. El sol, la refracción, la gama de tonos de los colores, ilusiones ópticas, visión binocular, perspectiva, entre muchos otros temas son visitados y explicados para grandes y chicos en este museo ubicado en el extemplo de San Pedro y San Pablo construido por la Compañía de Jesús entre 1576 y 1603.

En funcionamiento desde el 18 de noviembre de 1996 como Museo de la Luz de la UNAM, existe también una sala donde se expone la larga historia y hechos que han sucedido en este espacio: iglesia, recinto del Congreso Constituyente (1822), biblioteca, colegio militar y cuartel, entre otros. En el edificio se pueden contemplar murales como el Árbol de la Vida o el Árbol de la Ciencia de Roberto Montenegro, el Zodiaco pintado por Xavier Guerrero y vitrales de vivos colores de estos artistas.

Así mismo, el Museo de la Luz alberga exposiciones temporales de arte, talleres y charlas relacionadas con la luz, su naturaleza, el efecto que tiene tanto en los ecosistemas y la vida diaria de los seres humanos. Este espacio ofrece conocimiento y una puerta para aquellos que quiera conocer el mundo de la luz y sus misterios develados, aunque la luz, percibida por cada uno, nos comparta otros.

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