Legado De La Crisis

El tema de la desigualdad es uno de los legados más importantes y acentuados que nos ha dejado esta crisis. Cada vez es mayor la brecha entre ricos y pobres, debido a los sucesivos recortes, despidos, congelación de salarios...Todo esto crea un clima de pesimismo, que unido a la aversión al riesgo de nuestra sociedad, las reglas estrictas de la moneda única, las tensiones políticas internas… crea un ambiente poco propicio para la inversión, el autoempleo y el crecimiento económico.

Otro de los mayores obstáculos para el crecimiento en los años venideros, será el peso de la deuda. Es necesario que la factura que resta por pagar de los excesos pasados se paguen. No será fácil compatibilizar el crecimiento económico con la reducción de la deuda, pero es indispensable saldar la deuda para que los mercados sigan teniendo confianza en nosotros y nos sigan concediendo financiación.

La crisis ha provocado que los países europeos se enfrenten a un futuro incierto. La crisis ha dejado en el sur de Europa unos niveles de crecimiento muy bajos, que afectan a casi toda la región, y están impidiendo que se consolide la recuperación. Esto afecta a su vez a la confianza, la demanda y la actividad diaria.

Como consecuencia de esta situación, en las elecciones europeas del pasado 25 de mayo de 2014, se produjeron unos resultados que evidenciaron que la evolución de la economía estaba afectando a la identidad de la eurozona.

Mi punto de vista

La economía mundial se encuentra en un difícil equilibrio. Por un lado, los países deben hacer frente al legado de la crisis global, que ha dejado un alto sobreendeudamiento y desempleo. Y por otro lado, adoptar medidas que permitan aumentar el crecimiento económico sin que la eurozona se vea amenazada.

Con respecto a lo primero, ya se han realizado algunas medidas como han sido el saneamiento de los balances de los bancos, por ejemplo, pero de momento insuficiente, así que mientras persista la debilidad de la demanda, sería bueno que se mantuviesen bajos los tipos de interés. Aunque las autoridades deberían de mantenerse atentas, para evitar la aparición de nuevas burbujas especulativas como la que originó la crisis.

Por otro lado hay que apostar por la recuperación en la zona del euro, la cual está en una recuperación frágil y desigual, pero hay que intentar que cambie de marcha.

Teniendo siempre presente, otros riesgos geopolíticos como puede ser la crisis de Ruso-Ucraniana que podría tener importantes consecuencias en la economía mundial.

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