Pedro y Maria

Pedro y María

En un lugar fantástico vivía un joven pescador a la orilla del lago Hurón, todas las mañanas antes del amanecer el joven se preparaba para dirigirse al lago a pescar con su caña favorita, él se despedía de su padre y emprendía camino, para después  de su pesca ir al mercado Camden donde los vendía en su puesto a los habitantes del pueblo y de esta manera obtener el sustento diario para él y su padre Juan que estaba enfermo. El lago era parte de su rutina diaria por lo que lo conocía a la perfección un día mientras Pedro caminaba hacia el lago, escucho a una joven gritar, al avanzar se percató que había alguien dentro del agua luchando por no ceder ante la profundidad del lago, Pedro soltó su caña y su mochila para correr a toda velocidad a ayudarla a salir de ahí, llegando a la orilla Pedro salto al lago y nado hasta llegar a la linda joven, estirándola hasta la orilla donde le ayudo a reponerse.

La joven le dijo que su nombre era María, que se acababa de mudar al pueblo junto con sus padres y su hermana, ella le platico que ese día se aventuró a ir al mercado sola y durante el camino sin darse cuenta se perdió hasta que llego al lago y al acercarse a admirar su belleza resbalo por el borde del lago, y sin saber nadar estaba ahogándose así que comenzó a gritar buscando auxilio de alguien. Pedro se ofreció a llevarla a su casa, cuando llegaron a casa de María ella le platico lo sucedido a sus padres e invitaron a almorzar a Pedro en agradecimiento por haber salvado a su hija de ahogarse.

Él le ayudo a María a conocer el pueblo y le enseño a pescar a ella y a su hermana Wendy, todos los días los tres amigos iban al lago a pescar, ahí jugaban y se divertían admirando la naturaleza de aquel majestuoso lugar, María y los demás recordaban lo acontecido como una anécdota que los llevo a conocerse, durante esos días María y Pedro compartieron anécdotas y aventuras que los llevaron a hacerse grandes amigos, desde entonces los jóvenes iban a pescar para después llevar su mercancía al mercado y ofrecerla a los habitantes del pueblo.

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