Que Puedes Hacer Por Tu Pais

“...QUÉ PUEDES HACER POR TU PAÍS”

Para salir de la clasificación de “chatarra” en que han caído los bonos de Puerto Rico y de varias corporaciones públicas, es impostergable la puesta en marcha de un plan de reactivación económica substancial cuyo impacto pueda revertir las tendencias financieras negativas de la Isla ante las casas evaluadoras y el mundo inversor.

La nueva degradación del crédito de Puerto Rico, esta vez por parte de Moody’s Investors Service, vino acompañada de una diagnosis que hemos venido postulando desde que comenzó nuestra gran recesión económica: que no hay evidencia de crecimiento económico suficiente para revertir las tendencias financieras negativas de la Isla.

En palabras de la analista de Moody’s, la administración de Alejandro García Padilla tomó “medidas fuertes y agresivas” para hacer frente a los problemas que Puerto Rico gestó por años. Pero el peso de la deuda (que representa más del 50% de la economía), la merma en la liquidez del Gobierno y un restringido acceso al mercado de capital suponen que “el perfil crediticio de Puerto Rico ya no es consistente con las características de un grado de inversión”.

Por los pasados cinco años hemos planteado que nuestros problemas financieros no pueden seguir atendiéndose mayormente desde una perspectiva fiscal, aumentando contribuciones y recortando gastos y dejando a un lado el crecimiento del sector privado y el desarrollo socioeconómico.

Es por ello inaplazable lanzar estrategias para generar empleo y promover actividad económica; y ver este asunto como una emergencia nacional que, como señalamos en el editorial sobre la degradación de Standard & Poor’s, conjure un esfuerzo multisectorial que trabaje en la renovación de nuestro obsoleto modelo de promoción de desarrollo industrial e infraestructura con un modelo económico sustentable y de equidad social.

Con esta segunda estocada que recibió el crédito del País en menos de una semana, se agrava el clima financiero y económico en general, y nuestra liquidez en particular, lo cual enmaraña el radio de acción de las alternativas que podría implantar el Gobierno para bajar su deuda, aumentar la liquidez y promover actividad económica. Empero, contrario al cuadro hasta indignante y de medias verdades que presentan sobre Puerto Rico importantes medios estadounidenses, como ayer The New York Times, y a pesar de lo que interesadamente quieren proyectar las casas clasificadoras para justificar estas degradaciones intransigentes, no estamos en un callejón sin salida.

Al tiempo que se trabaja en resolver el problema de liquidez en el corto plazo, y más allá de la propuesta emisión de $3,500 millones para solventar el Banco Gubernamental de Fomento (BGF), es factible reformar los gastos gubernamentales e implementar una gran reforma tributaria que considere opciones que incentiven el trabajo, la inversión y el ahorro, y que produzca un sistema simple, conveniente y eficiente que facilite el cumplimiento

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