Resumen El wendigo

El wendigo

La historia se dio en la última semana de octubre en Canadá en un bosque al norte de Rat Portage, como de costumbre en esa región se habían organizado numerosas partidas de caza, aunque este año los alces parecían estar extremadamente tímidos.

El doctor Cathcart, su guía Hank Davis, el joven Simpson quien era sobrino de Cathcart y estudiante de teología y Joshep Defago su guía eran los cuatro expedicionarios. También estaba Punk un cocinero indio que siempre había acompañado a Cathcart y a Hank en sus cacerías, su trabajo se limitaba únicamente a permanecer en el campamento y preparar los alimentos.

El grupo de expedicionarios se sentía desanimado esa noche pues ya había pasado una semana y no habían encontrado ni un solo alce.

Al ver la situación Hank sugiere cambiar de zona y ordena a Defago ir junto con Simpson al Lago de las cincuenta Islas pues pensó que tal vez allí estarían los alces. A Defago no le gustó mucho el plan pues su rostro reflejaba enfado y miedo.

En la mañana siguiente antes de que fueran las ocho, Simpson y su guía Defago empezaron a remar dirigiéndose hacia el lago de las cincuenta islas, aunque ahora Defago reflejaba en su rostro todo lo opuesto a la noche anterior, mientras que Cathcart y su guía Hank seguían un rastro que se dirigía hacia el occidente.

Luego de un rato Simpson y Defago dejaron la canoa y se adentraron en el bosque. Hacia las cinco llegaron al límite del bosque allí se encontraba el lago de las cincuenta islas.

Habían pasado dos días y no habían encontrado ni un solo rastro de alce, todo parecía en calma hasta que Defago le hizo una inquietante pregunta a Simpson, le pregunto si en algún momento había sentido un olor raro, lo cual Simpson negó inmediatamente y le devolvió la pregunta, Defago también negó haber sentido un olor fuera del normal, pero este no parecía tan convencido de ello.

Simpson y Defago se fueron a dormir, pero un fuerte movimiento violento, como si algo se arrastrara dentro de la tienda interrumpió el sueño de Simpson, al abrir los ojos vio pudo darse cuenta del llanto de Defago el cual estaba muy tieso y temblando como si estuviese huyendo de algo que estaba en la entrada de la tienda, Simpson le pregunto qué le pasaba, pero no obtuvo respuesta alguna.

A la mañana siguiente Simpson volvió a preguntarle qué había sucedido cuando de pronto se escucha una voz suave y retumbante a la vez que parecía venir desde las alturas y que al mismo tiempo sonaba muy cerca de la tienda la cual decía tres silabas las mismas silabas que conformaban el nombre de Dé-fa-go y un olor atosigante se esparció por todo el lugar. Inmediatamente el guía se puso de pie estiro los brazos y con gran rapidez se marchó repitiendo la frase “¡Ah! ¡Mis pies de fuego! ¡Mis ardientes pies de fuego! ¡Ah! ¡Qué altura, que carrera abrazadora!  Simpson agarro provisiones, el rifle y un hacha para marcar el camino y se fue en busca de su amigo, en el camino se encontró con las huellas de una criatura grande las cuales tenían ese olor repugnante y un color rojizo y al lado las de un ser humano.

Mientras Simpson seguía el rastro de las huellas comprendió que era el principio de un aturdimiento diabólico que podía llevarle a su propia perdición. Aquellas huellas que había estado siguiendo sufrieron una gran transformación pues las zancadas estaban demasiado separadas las unas de la otra y las huellas humanas comenzaban a parecerse a las de la criatura gigante, era imposible que un hombre normal pudiera haberlas marcado.

Simpson freno en seco al ver que las huellas habían desaparecido y no había rastro alguno de aquellos dos seres extraños. La noche se acercaba por lo que Simpson decidió abandonar la persecución y volver a la tienda,

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