SIN REMEDIO

Fui lo que seré

“Eran las seis y media y las manecillas seguían avanzando”

KAFKA.Franz La metamorfosis, capítulo 1, (1915)

La obra literaria “Sin remedio” de Antonio Caballero, fue publicada en el 2006, siendo la primera y única novela de este escritor. Rodeado de movimientos políticos, mujeres, entre otras situaciones, Ignacio Escobar, un poeta Bogotano debe lidiar con la cotidianidad de cada día. A continuación se analizará el estilo de vida de este personaje, su papel en la “revolución” y sus últimas horas de vida, para finalmente demostrar que Ignacio Escobar está condenado a ser un burgués de la sociedad Bogotana, sin importar su opinión frente a este hecho.

El estilo de vida del protagonista pasó por diferentes etapas, permitiendo leer su estatus social que se demostraba impenetrable pues a pesar de diferentes condiciones económicas y mentales su posición en la sociedad permanecía. Bajo el cuidado de su novia Fina, Ignacio Escobar podía vivir sin la necesidad de poner un pie en el piso. Ella se entretenía a diario con diferentes actividades recreativas mientras Escobar no tenía compromiso diferente a levantarse e ir al baño. Adicional a esto, Ignacio no tiene la necesidad de trabajar a diario en sus obras literarias pues sus ingresos económicos estaban basados en el resultado de su obra, se basa en el sustento que su madre le da cuando lo necesitaba. Al ser abandonado por Fina, Ignacio llega a vivir en condiciones deplorables pero no por falta de bienes económicos, mas sí por pereza tanto física como mental. Múltiples situaciones similares rodea cada instante del estilo de vida de Escobar donde el protagonista tiene la libertad de ver los días y noches pasar permitiéndose tal vez pensar demasiado. Preguntarse quién puede darse la libertad de sumirse en el pensamiento siendo un ente frente al mundo exterior revela la condición privilegiada de Escobar.

Por otra parte, Ignacio a causa de sus amistades con diferentes personajes de izquierda, termina involucrándose en todo este proceso sin haberlo aprobado. A pesar de ir en contra de los valores y pensamiento inculcados por su familia conservadora, es inevitable para él no representar la típica figura de un hijo frustrado de la burguesía. Sin necesidad de expresar puntualmente su posición y criticando numerosas veces tanto a revolucionarios, conservadores y liberales como cualquier otro punto de vista por medio de los constantes pensamientos del protagonista en la novela se puede rastrear que la posición política neutra del protagonista por el hecho de ser tan pasiva, sumada con su posición social y sus amistades, lo llevarían a su fin.

Al igual que Rimbaud en su última etapa de vida, Ignacio vive sus últimos momentos de la manera que más critica. Salvado de asumir la realidad deja sus últimas respiraciones

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