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Unidad curricular: Morfosintaxis del español


Enviado por   •  20 de Junio de 2023  •  Documentos de Investigación  •  978 Palabras (4 Páginas)  •  62 Visitas

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República Bolivariana De Venezuela.

Ministerio Del Poder Popular Para La Educacion Superior

Universidad Nacional Experimental “Francisco De Miranda”

Programa de Educación en lenguas extranjeras, mención inglés.

Unidad curricular: Morfosintaxis del español.

Punto Fijo estado Falcón

El ingenioso Hidalgo don Quijote de la mancha.

(Guion)

    Integrantes:

  • Jackson Querales.
    Cl: 31.719.516
  • Tifany Bermúdez.
    Cl: 15.981.937
  • Adrián Atiencio.
    Cl: 31.576.074
  • Joseydys Petit.
    Cl: 30.949.353                                                                                  
    Profesor: Joel Molero.
  • Joseph Hernández.
    Cl: 28.777.542
  • Dayen Rodríguez.
    Cl: 31.654.140

12 de junio del 2023

El ingenioso Hidalgo Don Quijote De La Mancha.

Alonso Quijano es un hidalgo -es decir, un noble sin bienes y de escala social baja-, de unos cincuenta años, que vive en algún lugar de La Mancha a comienzos del siglo XVII. Su afición es leer libros de caballería donde se narran aventuras fantásticas de caballeros, princesas, magos y castillos encantados. Se entrega a estos libros con tanta pasión que acaba perdiendo el contacto con la realidad y creyendo que él también puede emular a sus héroes de ficción.

Don Quijote: “ya lo decidí, éstas novelas me inspiran a que me convierta en un respetable caballero. A desempolvar las viejas armaduras de los abuelos para que pueda comenzar mi travesía”.

Don Quijote: “necesito un nombre digno “Don Quijote De La Mancha”, un noble corcel, el viejo caballo “Rocinante” y una bella dama a la que dedique mis logros.

 

Don quijote sale en busca de aventura. Tiene un aspecto ridículo, pero está decidido a llevar a cabo hazañas heroicas.

Don Quijote: “¿Qué será de mi futuro como caballero? ¿Puedo yo considerarme uno? ¡Pues no! Ya que se requiere que tenga armas blancas como los demás caballeros. Ahora que lo pienso, soy un ser perfecto, mis hazañas me llevarán a ser reconocido en novelas, el destino quiere que yo sea un caballero”.

Comenzó a anochecer y Don Quijote se introdujo en Una venta para pasar La noche. Allí encontró a dos mujeres.

Don quijote: ¡se ven muy hermosas y rimbombantes bellas damas!

Mujer 1: ¡Qué manera tan peculiar de hablar tiene este sujeto, quizás sea algún demente más que llegó a la posada!

Mujer 2: Con ese cortejo barato no consigues aludirnos siquiera, ni piense en tener oportunidad.

Enojado con los comensales de las damas ante sus piropos, Don Quijote ve llegar al dueño de la posada y ya que está parece un castillo, comienzan a surgir las primeras diferencias con la realidad:

Don Quijote: ¡Le pido que me haga un caballero señor!

Dueño de la posada: “tal vez esté loco este sujeto, quizás pueda sacarle dinero así que es mejor que siga su juego”.

Dueño de la posada: “Don Quijote de la mancha dijo que se llamaba, para que pueda hacerlo un caballero debe vigilar las armas que portará en la capilla hasta que amanezca, pero como no tenemos capilla, porque, eh, ¡Está en construcción! Deberá velar por las armas en el lugar mas sagrado de ésta posada… ¡el patio!”.

Don Quijote apegado a su misión se quedo vigilando las armas en el patio para que el ventero lo nombre un caballero, y cuando comenzaba a aburrirse, dos ladrones llegan a llevarse las armas por lo que el Quijote decidió enfrascarse en una lucha que resultaba más épica en su imaginación. Hasta que el dueño de la posada lo notó.

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