Valoracion Critica Historia de una escalera

VALORACIÓN CRÍTICA DE HISTORIA DE UNA ESCALERA

DE

ANTONIO BUERO VALLEJO

“Historia de una escalera” (1947-1448) es una obra de teatro estrenada en el Teatro Español de Madrid el 14 de octubre de 1949, escrita por  Antonio Buero Vallejo por la que recibió el Premio Lope de Vega y que marcó un hito en el teatro de postguerra. La obra pertenece a la corriente del realismo social.

Antonio Buero Vallejo fue un gran dramaturgo español, académico y premio Cervantes perteneciente a la Generación del 36. Durante la Guerra Civil española combatió del lado republicano, fue condenado a muerte, aunque se le conmutó la pena, estuvo en la cárcel casi siete años; allí coincidió con Miguel Hernández. La crítica ha clasificado su obra como teatro simbolista y de crítica social.

“Historia de una escalera” es una obra que consta de tres actos que trascurren en tiempos diferentes. Toda la historia se desarrolla en dos tramos de escalera de un modesto edificio. Los personajes principales son Fernando un mal trabajador de una librería, Elvira hija consentida que goza de una posición social un poco más “elevada”; Urbano obrero sindicalista; Carmina hija de una familia humilde que aspira a casarse con Fernando. En el primer acto ya nos desvela la precariedad social en que viven  de la que sueñan  poder salir y progresar. Fernando y Carmina fantasean con llegar a ser alguien en la vida y conseguir una buena posición social. Al final del acto se derrama un cántaro de leche que simboliza un poco el cuento de la lechera. En el segundo acto han trascurrido diez años en la que han visto truncadas sus esperanzas, Fernando se casa con Elvira a la que no quiere para vivir mejor y Carmina acepta a Urbano para no quedarse sola prometiéndose hacerse felices mutuamente. En el tercer acto han trascurrido otros veinte años, los protagonistas han tenido hijos con rencillas y resquemores entre ellos, ninguno ha conseguido cambiar su estatus social ni salir de la pobreza, sumidos en la misma infelicidad y frustración. El final de la obra se muestra la misma escena que viven los hijos de los protagonistas, el hijo de Fernando y la hija de Carmina, con los mismos sueños que tuvieron sus padres décadas atrás, dejando abierto al lector la posibilidad imaginarse un mejor desenlace.

El autor utiliza un lenguaje coloquial y sencillo para llevarnos a la España de la posguerra, fiel espejo de la situación de la sociedad de la época, la pobreza, las grandes dificultades para poder vivir y salir adelante. Al mostrarnos en mismo escenario en los tres actos nos recalca el símbolo del paso del tiempo, la inmovilidad social y fracaso personal, un drama muy realista de la sociedad del momento atrapada en un mundo miserable y condenados revivir la misma historia o quizás, con el final del tercer acto, el autor quiere dejar abierta la posibilidad de poder cambiarla.

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