La Vida. La vida es uno de tantos misterios de la existencia humana, un misterio tan profundo como la muerte

La vida

La vida es uno de tantos misterios de la existencia humana, un misterio tan profundo como la muerte.

La vida está llena de momentos felices pero también de situaciones tristes, la muerte de un ser querido, las decepciones personales, los fracasos, tal así es el caso que nos llegamos a preguntar de tan frustrados que nos ponemos ¿Qué es la vida? o ¿Cuál es su sentido?.

El sentido de la vida

Desde muy jóvenes las personas empezamos a plantearnos una pregunta que inquieta al ser humano desde siempre: ¿Cuál es el sentido de la vida?, o lo que es lo mismo, ¿Para qué vivir? Nadie en el mundo ha podido dar una respuesta concreta a estas preguntas, más sin embargo si les hemos dado nuestra propia respuesta, vivir la al máximo se feliz.

En la sociedad Actual, coexisten con las prisas, el materialismo y la relación científica un sentimiento, cada vez más constatable, la falta transcendencia vital, un profundo deseo de encontrar un sentido profundo a la vida. Desde la ciencia hasta la religión trata de explicar ¿Qué es? o ¿Cuál es el sentido de la vida?, algunos filósofos decían que el final de nuestra vida es unirnos a Dios, otros proponen que nuestras vidas tienen un objetivo diferente, un Filósofo en específico propugna la lucha del hombre para construir una sociedad mejor (Karl Marx.

Por otro lado la ciencia no es su objeto de estudio pero se puede contar con opiniones y creencias de aquellos científicos que a nivel personal han expuesto, Albert Einstein no creía en un Dios Personal pero si en una Divinidad Cósmica. En relación con todo esto tratan de explicar ¿Cuál es el origen de la vida? porque al encontrar lo podremos saber cuál es su sentido.

Hubo un psicólogo llamado Viktor Frankl, el cual decía que no debemos preguntar por el sentido de la vida, porque seremos nosotros mismos los interrogados. Y, añadía, que el sentido último de la vida sería, de cualquier forma, demasiado alto para nuestro nivel de comprensión.

Frankl utiliza la motivación para seguir viviendo, aún en pésimas circunstancias, para demostrar que la verdadera motivación para la vida es esa fuerza interior, la libertad espiritual que es la que elige si luchar o rendirse. La persona enfrentada a los límites de la desgracia y el horror, descubre en la fuerza de su supervivencia a su “yo soy”.

El mensaje siempre es que hay siempre un motivo para seguir viviendo, pero el hombre aun así se pregunta una y otra vez ¿Cuál es el sentido de la vida?

Tal vez solo deberíamos de dejar de hacernos tantos cuestionamientos sobre enigmas a los cuales aún no tenemos respuestas, y si las tuviéramos, nos seguiremos haciendo preguntas con respuestas fuera de nuestra propia imaginación y perderíamos la razón al no saber ¿Por qué no tenemos la capacidad de entender aun esos cuestionamientos? o tal vez y solo tal vez sería el comienzo del expansión de nuestras mentes.

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