9 Principios. “Actividad de Metacognición”

Preparatoria 17[pic 1][pic 2]

Universidad Autónoma de Nuevo León

Filosofía

 “Actividad de Metacognición”

Rafael Ríos Cazares

Cecilia Soledad Ibarra Treviño

Ariana Zapata Morales

Lizbeth Alexandra González Luna

Venecia Rubí Farías Sánchez

Antonio Alejandro Montoya Martínez

Nallely Guadalupe Contreras Chávez

21 abril de 2016, Ciénega de Flores, N.L.

Primer principio

Cualquier criatura está destinada a desarrollarse de manera adecuada  y correcta. En los animales un órgano que ya no se emplee o algo que ya no se utilice, son una contradicción, porque nos encontramos con un juego arbitrario si renunciamos a este principio.

Segundo principio

El texto sobre el segundo principio de Kant da a entender que las disposiciones que se apuntan al uso de la razón deberían ser desarrolladas por toda la especie sin excepción. Que la razón en un humano es como ver más allá de lo convencional en todo, ampliar cada cosa que haya a su alcance y no conformarse con menos. Pero esta “razón” no actúa por instinto nuestro, se va desarrollando poco a poco, y que para que esta funcione se necesitan una serie de generaciones que transmitan conocimientos para que después se desarrolle en cada uno de nosotros y llevemos a cabo la acción para la que está hecha, y en el momento en el que se esté desarrollada, esta debería crear o establecer sus metas, y si no se logra esto se considerarían aquellas “disposiciones naturales” como inútiles o innecesarias y de ser así, todos los principios habituados y funcionales se cancelarían al igual que la naturaleza la cual nos sirve para opinar sobre todas las demás cosas .

Tercer principio

En este principio, la naturaleza ha querido que el hombre logre todo aquello que no se imagine que pueda hacer. Porque la naturaleza nada hace en vano, y el hecho de haber enseñado al hombre a usar la razón, no fue en vano. Él debía obtener todo por sí mismo, no por alguien más, ni que el conocimiento viniera de otro individuo. Toda tenía que ser obra suya. Parece que la naturaleza, le importaba que el hombre fuera el quien hiciera todo por si solo y así tendría bienestar consigo mismo. Todo ser humano tiene que llegar o ir más allá de la perfección. Las nuevas generaciones ya no son igual a las de antes, antes se mostraba más interés por descubrir y ahora ya no es así.

Cuarto principio

Lo que le sirve a la naturales para desarrollar todas sus disipaciones es el antagonismo, esto es la medida en que el antagonismo que se convierte en la causa de una orden legal. Lo que se tiene aquí sobre el antagonismo es la insociable sociabilidad de todos los hombres pues esto es decir su inclinación para formar sociedad, va en una unidad de resistencia constante que amenaza en disolver. Está a la disposición de la naturaleza, los hombres tienen una inclinación por entrar en la sociedad porque ellos se sienten como más hombres ósea ellos se sienten al desarrollo de su disposición natural pero ellos tienen una tendencia a aislarse porque ellos se tropiezan con la cualidad insocial que lleva aponerse a la disposición según le place pero esta resistencia hace que despierte la fuerza del hombre y la lleve a enderezarse la inclinación a la pereza, el poder o los bienes logran una posición entre sus congéneres tampoco puede soportar pero no también no puede predecir y pues así como vemos pueden transcurrir los primero pasos serios a la rudeza de la cultura, pues esto consiste en el valor social de un hombre sus talentos se van desarrollando poco a poco primero se forma el gusto y después se la continuada ilustración esto se convierte en un comienzo de fundación de una madera en la que pensar que a lo largo se pueda cambiar la rudeza natural para la diferenciación natural y lo moral.

Pues aquellas características tan poco amables, el cual ellos tiene que encontrar motivos de sus pretensiones egocéntricas sus talentos quedarían adormecido por germen una arcádica vida de pastores en la que ellos reinan en un acuerdo perfecto con una satisfacción y con una versatilidad perfecta, los hombres tan buenos como borregos encomendados en su trabajo, pero ellos apenas si se preocupan de esta existencia suya ósea ellos se creen más dominantes que al animal doméstico ya que gracias sea su naturalidad por la vanidad y la maliciosamente porfiadora por su afán de poseer o mandar pero también si ellos todos las excelentes disposiciones naturales raquíticas. Sus impulsos naturales de ellos también de ellos donde nace tanto daño y porque al mismo tiempo nace nuevas tenciones al mismo tiempo también conduce nuevas tenciones de las fuerzas a nuevos desarrollos de sus disposiciones naturales, también el orden de su sabio creador y no la mano chapucera o la envidia de un espíritu milagroso.

...