CRÍTICA A LA EDUCACIÓN PROGRESISTA EN LA CONCEPCIÓN PRAGMÁTICA DEL CONOCIMIENTO

Me parece que John Dewey tiene puntos importantes que retomar, en cuanto a la escuela progresista vista desde el pragmatismo. Él menciona que “La escuela es antes que todo una institución social”. En este caso la escuela no solo es un recinto para guardar niños, limitándose a una actividad de enseñanza y aprendizaje rutinaria, sino que debe propiciar una ambiente social, en donde el alumno interactúe con su entorno escolar, socialice e involucre sus sentidos e intereses retomando y viviendo experiencias significativas.

Como menciona la educación progresista, “la escuela es creada para la vida, para llegar a ser el ambiente natural del niño y convertirse en el espacio en el cual el niño vivencia, así también como para aprender los elementos primordiales en el buen desempeño en su vida como adulto”.

En este aspecto, el pragmatismo es una herramienta útil que, bajo mi perspectiva permite explicar el valor que tienen las experiencias o vivencias en la formación del niño, además fundamenta nuevas formas de actuación o intervención pedagógica en la práctica docente, lo cual nos transporta a no quedarnos con las viejas concepciones tradicionalistas, sino a llevar a cabo un “progreso”.

Los postulados básicos de la escuela nueva me parecen muy importantes, porque parten desde la idea de que el estudiante se ubica en el centro del sistema escolar, alrededor de quien giran los procesos de la escuela.

Vemos vigente esta aseveración, porque los planes y programas de la actual reforma, plantean que todo el proceso de enseñanza y aprendizaje parta de los intereses y necesidades del alumno, retomando su contexto.

Precisamente los postulados de la escuela nueva, mencionan que en un primer momento, el fin de la escuela no puede estar limitado al aprendizaje: la escuela debe preparar para la vida, y estoy totalmente de acuerdo en esto, porque para que queremos a un infante con mucho conocimiento pero sin saber aplicarlo y actuarlo en las situaciones presentadas en su vida.

Segundo, si la escuela debe preparar para la vida, la naturaleza y la vida misma deben ser estudiadas. Me parece que es indispensable conocer y entender que en la vida se presentarán diversas situaciones que no debemos pasar por alto, sino que ameritan analizarlas para saber actuar de manera más eficaz.

Tercero, los contenidos educativos deben organizarse partiendo de lo simple y concreto hacia lo complejo y abstracto, de esta forma el alumno se ira adentrando poco a poco al conocimiento, aunque yo le agregaría que estos contenidos deben tener una cierta relevancia social para la vida del alumno.

Cuarto, al considerar al niño como artesano de su propio conocimiento, el activismo da primacía al sujeto y a su experimentación. Aquí es en donde vemos al alumno que no solo se queda con el conocimiento, sino que lo pone en práctica de acuerdo a sus criterios de actuación.

Quinto,

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