Comentario De La Naranja Mecánica

Comentario de la Naranja Mecánica

Esta película trata sobre un joven problemático, Alex, que vive con sus padres, a los que suele engañar. Su vida se desarrolla durante las noches, cuando frecuenta el bar lácteo y sale con sus amigos a practicar fechorías. Alex y sus drugos están enganchados a la ultra violencia, pero Alex es un líder muy duro y sus compañeros se amotinan contra él, es el encargado de guiarnos por este Londres distópico. Y es que ellos son la perfecta encarnación de la radical pérdida de valores que la sociedad padece. Su idea de la diversión se basa en el consumo de drogas leche-plus, que toman en el bar Korova y que es una mezcla de leche y diversas sustancias que exacerban la conducta violenta, la propia ultra violencia y el sexo.

Tras intentar robar en una mansión y herir a la propietaria, Alex sale de la casa y sus amigos lo hieren, propiciando su arresto por la policía. Ingresa en la cárcel y se somete a técnicas de modificación de conducta, de forma que rechaza la violencia... pero en todas sus formas. No puede defenderse, y además hay otros efectos secundarios que harán de la vida de Alex un infierno. Su actitud es de continuo desafío y enfrentamiento a la autoridad, así como al resto de la comunidad: desde ancianos a semejantes, pasando por sus propios padres. Sin embargo, ¿se puede responsabilizar completamente a estos jóvenes de su actitud? ¿No existe una cierta responsabilidad social en la educación que reciben? Las personas son en gran medida producto de la sociedad que les rodea. Observamos en algunas secuencias de la cinta unas calles sucias y desbarata-das pero, quizá intencionadamente, no queda claro si el caos imperante es causa o consecuencia de la conducta socialmente desviada de los jóvenes protagonistas.

Aunque el tema central de la película es la violencia, ésta se ramifica y hunde sus raíces en asuntos muy diversos. Por una parte, encontramos la traición de unos compañeros que ven que la violencia que ejercía de mano de su líder Alex se vuelve contra ellos. Por otra parte, la violencia psicológica a la que se ve sometido, de forma voluntaria, nuestro protagonista. Éste se ofrece a participar en un proyecto experimental con el que los médicos prometen transformar la conducta de los convictos tratamiento que se presenta como alternativa al ojo por ojo, diente por diente que abandera la prisión. Durante un corto periodo, el joven se somete a un procedimiento de condicionamiento: le obligan a visionar, sin apartar la vista de la pantalla, películas de alto contenido violento; mientras esto ocurre, las drogas que le han suministrado le hacen encontrarse profundamente enfermo, lo que le lleva al rechazo de la violencia, al asociar esa mala sensación con la misma. Por otra parte, la doble venganza perpetrada por sus viejos compañeros de juego y por una de sus antiguas víctimas. Por último, el monopolio estatal de la violencia.

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