El Hombre Mediocre

Introducción

Al leer el libro El hombre mediocre me di cuenta de que no todas las personas son como uno cree, a veces pensamos que hay muchas personas excelentes pero según el libro son muy pocas las que llegan a esta excelencia, por qué?. Porque la mayoría de las personas hacemos las cosas por hacerlas, muchas veces no le ponemos empeño a lo que nos piden y hacemos estrictamente lo necesario y no vamos mas allá de nuestras habilidades para poder llegar a ser verdaderos hombres y mujeres que le sirven de manera total a la sociedad. También existen muchos lideres, gobernantes e incluso maestros que son mediocres y que en ves de impartir ideales, imparten mediocrísimo creando más hombres mediocres.

El ideal

El fijarnos metas y querer cumplirlas perfectamente y también sin ser mediocres lleva un gran esfuerzo pero también lleva un ideal, ese ideal es como un camino que nos lleva a hacer grandes cosas pero también es considerado como un camino a la perfeccion. La experiencia toma un papel importante en el idealismo ya que la experiencia es el fundamento de las hipótesis. Esto nos ayuda a la creación de un idealismo moral libre de religiones o dogmas que nos rijan por que a medida que el hombre evoluciona, se vuelve mas observador y menos conservador, tanto que no se deja guiar por explicaciones abstractas y tontas, sino que intenta crear sus propios ideales y adaptarse a la naturaleza y la sociedad, pero esta creación de ideales no define si son buenos o malos ya que la creación de estos ideales es natural ósea que se forman por la observación del hombre al igual que la mayoría de los fenómenos que existen en el mundo.

Los hombres que siguen a la perfección mas allá de lo que hay son los idealistas. Su temperamento es perseguir las metas más difíciles para ser mejores. Los idealistas tienen muchas cualidades, poseen sentido común, también aprecian lo bueno y no lo regular a diferencia de los mediocres que aprecian lo bueno y lo regular. El Idealista romántico es de lo mas exagerado ya que es una persona ambiciosa que siempre quiere hacer lo mas y termina haciendo lo menos, esta persona tiene una gran curiosidad y sensibilidad y forman ideales sin pensar que son irreales.

El idealista estoico es aquel que se rehúsa a la mediocridad sin importarle cualquier cosa, es alguien bastante impulsivo y si para no ser mediocre no tiene que respetar las ideas de los demás l hará sin importarle cualquier cosa con tal de no ser mediocre.

Símbolo

La lucha entre los idealistas y los mediocres tiene su símbolo: Perseo exhibiendo la cabeza de medusa. Sus labios parece que hablaran y dijeran a los jóvenes que no fueran mediocres y que formaran una personalidad firme. A los maduros les dice que tengan más ideales. El gesto del símbolo significa que hay que decapitar a la mediocridad.

El Hombre Mediocre

Aurea Mediocritas

En la gran mayoría de las personas sucede que la naturaleza que nos envuelve es asombrosa y hermosa pero también se da cuenta que hay muchas cosas dentro de ella que no entenderían y aunque alguien se las explicara seguirían sin entenderla. Se requieren cierto tipo de Ética y de haber estudiado para poder llegar a la perfección si se carece de ellos es imposible tener ideales. Cualquier persona que carece de ambos aspectos vive creyendo de lo que les dicen los demás y no tienen la capacidad de opinar acerca de esto y no son capaces de formar ningún ideal. La mediocridad podría ser definida como: ausencia de características personales que permitan distinguir al individuo en su sociedad. Un ejemplo seria, Si reunimos a 100 hombres ellos coincidiría en lo mediocre, pero si reunimos a 1000 genios bastaría para reunir solo el alma de un mediocre. La personalidad individual es cuando cada uno se diferencia de los demás pero muchos hombres no la tienen y están moldeados por el medio por eso estas personas carecen de carácter.

El hombre mediocre en la sociedad

No todos poseemos las mismas cualidades que un genio o no poseemos cualidades similares pero eso no quiere decir que seamos mediocres. Cada persona es el resultado de 2 cosas, La herencia y la educación. La herencia Todos al nacer recibimos elementos y cosas que crean nuestra personalidad que siempre nos va a acompañar, mientras que la educación se encarga de adaptarlo dentro de la sociedad actual y de prepararlo para las normas actuales que rigen nuestra sociedad. El hombre mediocre es por asi decirlo una sombra de la sociedad que simplemente se rige por dogmas y como no es capaz de pensar por si mismo ni de crear alguna hipótesis o conocimiento no tiene ideales. Toda persona creativa e inteligente es automáticamente enemiga de la mediocridad. La creación lleva muchos sacrificios y esfuerzo original que surge de la idea de algún individuo, la historia recuerda solamente a los creadores no a los imitadores pero ellos no tienen la culpa de serlo, solamente son personas que quieren vivir la vida sin preocuparse de algún problema o de elevar su nivel intelectual.

Como se ha dicho, un hombre mediocre es aquella persona que no se preocupa por llegar a la perfección ni forma ningún ideal además de que no tiene personalidad. Ellos son mansos y rutinarios y esto en la sociedad es un peligro si varios mediocres se juntan crearían una rutina aburrida y no se tendría la oportunidad de avanzar, así que la sociedad se quedaría estancada en un solo lugar. Pero que tal que un idealista estoico quisiera luchar contra la mediocridad, pues el debería de luchar contra los dogmas, que son proposiciones que se asientan por firmes y ciertas. La vulgaridad es como el símbolo de los mediocres y esto tiene antecedentes desde tiempos pasados ya que existían razas primitivas que no estaban educadas.

La mediocridad Intelectual

El hombre rutinario

La rutina es donde están los mediocres por que se acostumbran a vivir igual una y otra y otra vez y no cambian o exploran algo nuevo, a ellos les gusta vivir del mismo modo para siempre además la rutina es la renuncia a pensar por que cuando se vive dentro de cualquier rutina se hace el mas mínimo esfuerzo por pensar ya que se sabe lo que va a seguir durante el día, ahí se va derrumbando poco a poco la inteligencia del individuo. Los prejuicios son creencias anteriores a la observación, los juicios exactos o erróneos son consecutivos a la rutina. En un verdadero hombre mediocre

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