El reloj de Ezequías

[pic 1]El reloj de las Ezequías:

Is – Profeta Isaías

R – Rey Ezequías

P1 –  Plebeyo I

P2 – Plebeyo II

Pr –  Portero real

(van entrando los personajes EU y P1 y comienzan una conversación)

P1 – Sacerdote soy, por la vida del Dios nuestro Señor, no me he ido a causa de la enfermedad de nuestro rey Ezequías.

P2 –  Tu Elías que sirves y ayudas hace tanto tiempo a nuestro rey Ezequías, tú sabes más que yo, el motivo de su enfermedad. Ezequías es muy joven para morir, ¿ no será un castigo?.

P1 – No, ¿por qué cuales de sus buenas obras Yavhé lo castigaría?

(se dirigen al escenario y continúan la conversación)

P1 – Tu sacerdote del Dios vivo, eres testimonio de cómo Ezequías restauró en Judá el culto a Yavhé.  

P2 – Tienes toda la razón, y no solamente concuerdo contigo tengo que afirmar que aquella victoria sobre nuestros enemigos en la tentativa invasión contra Jerusalén fue una señal clarísima de la bendición de Dios al reinado de Ezequías.

P1 – Pero por el Señor de los Ejércitos, ¿qué pasará con nuestro rey? No lo sabemos. Además, si él está próximo a morir de eso no hay dudas. (hace una pequeña pausa) Es que hoy viene al palacio el profeta Isaías, ¿sabrá él la razón de este misterio?

(se abre el telón y se encuentra el rey en una silla sentado enfermo y entran P1 y P2 esperando la llegada del profeta)

(cuando llegan P1 Y P2 le hacen una reverencia completa al mismo tiempo al rey)

R – (gime de dolor ante la enfermedad)

(llega Pr y le hace una reverencia completa hacia el rey)

Pr – ¡Mi señor y mi rey!, está en la puerta del palacio el profeta Isaías.

R –  Hacedlo pasar ante mi presencia.

(Pr se dirige a buscar al profeta y luego entra con el profeta y le hace una media reverencia al rey)

R –  Isaías, hijo de Amós, profeta de Yavhé, decidme si es que sabes la causa de porque padezco esta enfermedad

Is – (con voz estentórea y triunfante)  Así habla el Señor: Ordena todos los asuntos de tu casa, porque vas a morir y no vivirás más.

(el rey queda atónito y comienza a llorar desesperado)

R –  Es necesario que yo me vaya, en el apogeo de mi vida y de mis días… Para estar con los más tristes muertos y no poder vivir lo que resta de mis años… Cuán tan guerrero yo he sido en mi vida pero ahora fue cortada mi trama… Como un león que tritura todos los huesos, así Vos me consumisteis día y noche… (mirando hacia el cielo) “¡Oh, Señor! Recuerda que yo he caminado delante de ti con fidelidad e integridad de corazón, y que hice lo que es bueno a tus ojos, ¡Socórreme Señor Dios nuestro! (el rey se deshace en llanto y gritos)

...