Estado Naturaleza

Si la vida en el Estado de naturaleza fuese buena, no habría necesidad de un Estado; así el contrato social es fundamental para regular el accionar social.

El origen histórico de la comunidad política se remonta a las causas primarias, que hayan dado nacimiento a la misma. Cabe mencionar que no hay que confundirlo con el origen institucional, que se entiende por su especial estructura y planificación a través de la historia. Son dos conceptos distintos, a pesar de que se interrelacionan y que actualmente no tiene sentido separarlas.

El hombre es un ser social, por sus características y necesidades, es indispensable para él vivir con otras personas. La política en el mundo tiene su origen en el mismo hombre y en su proceso de socialización. Hemos de tener en cuenta el principio Aristotélico, que marca a la familia como primera forma de sociedad (sociedad familiar como núcleo de todas las formas sociales sucesivas), conformadas por padres e hijos, en donde el padre se convierte en el núcleo de esta, siendo él quien dirige y organiza; es decir, se define la conformación de un gobierno.

Una vez mencionado lo anterior podemos indicar cada uno de los estadios de la comunidad política, iniciando con el Estado de Naturaleza (iusnaturalismo) que como menciona Rousseau el hombre en estado natural es libre, robusto, fuerte y autosuficiente, mientras que Hobbes mantiene el principio de que el hombre es el lobo del hombre, causando la guerra de todos contra todos. Como segundo estadio, tenemos a la familia, como una forma básica gubernamental, en donde existe una autoridad con poder, en tercer estadio la unión de familias que permiten la conformación de sociedades.

Desde el estado de familia hasta el estado civil, el hombre ha pasado a través de diferentes fases intermedias que hacen el estado, más que la antítesis del estado pre-político. Finalmente, el paso de una fase a otra, del estado pre-político al estado político. Se produce mediante un proceso natural de extensión de las sociedades menores a las mayores, no se debe a una convención sino a un acto de voluntad racional mediante el Contrato Social presupone en su origen sujetos libres e iguales, del mismo modo que en el estado de naturaleza la libertad y la igualdad son naturales.

Según los filósofos: Hobbes, Spinoza, Rousseau, Locke y Kant; para dar origen a un estado hacen falta dos acuerdos sucesivos: El “Pactum societatis” en base al cual un cierto número de individuos deciden de común acuerdo vivir en sociedad y el “Pactum subiectionis” en base al cual los individuos así reunidos se someten a un poder común. El primer pacto transforma una multitud en un “Populus” el segundo un Populus en un “Civitas”.

Aplicando todo lo anteriormente mencionado a la sociedad actual, podemos ver como el contrato social es viable en nuestro accionar cotidiano, ya que como seres sociales cedemos nuestros derechos

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